miércoles, 4 de noviembre de 2015
El «vía crucis» de los chóferes paraguayos «crucificados»
Un hombre permanece con un clavo en la boca frente al ministerio de justicia y trabajo de Asunción. Foto.Andrés Cristaldo Benítez/Efe

Con un clavo en la boca frente al ministerio de justicia y trabajo. Foto.Andrés Cristaldo Benítez/Efe

Asunción. SAH/Efe

La escena se repite en Paraguay con cierta frecuencia. Las crucifixiones como forma de protesta sacuden a los ciudadanos y al Gobierno. Cinco permanecen con los clavos y en la cruz. El resto de los chóferes  «crucificados» desde hace unos cuatro meses frente al Ministerio de Trabajo,  fueron desalojados por la Policía por orden judicial.
El desalojo de las 12 personas clavadas en cruces de madera se produjo de forma pacífica y contó con la colaboración de otros trabajadores de la línea 49 de autobuses, que protestan por el despido de 51 conductores.

Tras el desalojo, la mayoría de los «crucificados» abandonaron esa protesta, excepto cinco de ellos, que fueron trasladados, sin ser desclavados, al interior de un local situado a unos pocos metros del Ministerio de Trabajo, en el centro de Asunción.
«Nos quedamos sin sitio para albergar a todos y solo cinco pudieron continuar», asegura María Candia, representante de la Federación de Trabajadores del Transporte de ParaguaCandia, quien puntualizó que la orden judicial precisaba que los «crucificados» fueran desalojados de la vereda del Ministerio.
Esos cinco «crucificados» serán trasladados a lo largo de la mañana y en diversos vehículos privados hasta el Palacio de Justicia, donde han sido citados a declarar a causa de un recurso de amparo promovido en su contra por el Ministerio de Trabajo.
A esa comparecencia están citadas un total de 17 personas, incluidas las cinco que siguen «crucificadas» más otras tres que mantienen el mismo tipo de protesta en la parada de la línea 49 en la ciudad de Limpio, en el Gran Asunción.
«Será como un vía crucis», indicó Candia.
La orden de desalojo fue emitida cuando finalizaba la segunda y última jornada de la huelga del transporte público que fue convocada en el Gran Asunción por varios sindicatos.

Con el clavo en la palma de la mano

Con el clavo en la palma de la mano

Los sindicatos reivindicaban, entre otros puntos, que los 51 despedidos de La Limpeña, la empresa donde surgió el conflicto, fueran readmitidos a sus puestos.
Según los trabajadores de la firma, los despidos se debieron a su intención de formar un sindicato.
La admisión en el registro del Ministerio de Trabajo de ese sindicato fue otro de los puntos que motivaron la huelga de transporte público.
Tras el paro del transporte, la plenaria de centrales sindicales convocó una huelga general en todo el país para el próximo 18 de diciembre.