lunes, 15 de febrero de 2021
«Objetivo España», por Carmen DE CARLOS

Por Carmen DE CARLOS, para SudAméricaHoy

Ahora le toca a las niñas. Primero fue su padre, el rey Felipe, por defender, sin concesiones, la democracia de un golpe de Estado. Antes fue el abuelo Juan Carlos, zascandil y algo fullero, cuando lo tenía todo. No hay limite, todo vale con tal de encubrir sus desmanes en la caja de un partido procesado y las contradicciones de su líder. No, no hablamos del PP (Partido Popular), hablamos de Podemos, el mayor error de la historia de la democracia española, el gigantesco estafador de la buena voluntad de muchos de sus votantes, el “movimiento” empeñado en hacer un peronismo a la española o “europeronismo”, como he leído en alguna parte. España votó la Constitución del 78, donde se eligió un sistema de Monarquía Parlamentaria. Nadie nos obligó así que decir que es imposición por linaje es, sencillamente, mentira.

Atacar en la televisión pública (RTVE) a un niña que será futura jefa de Estado por estudiar los dos últimos cursos del bachillerato en Gales es mezquino además de paletos. Identificar esta decisión, que pagan sus padres con su asignación, con el traslado de Juan Carlos I a Abu Dhabi, es de una maldad  sorprendente. Los que rotularon -con el guiño de los jefes y de Rosa María Mateo, la eterna administradora única– con esa mala leche, son los enchufados que cobran del Estado, como el vicepresidente Pablo Iglesias (el de la finca con el casoplón y destructor presunto de la tarjeta SIM de una ex), el que asciende con su consorte y ministra de igualdad, a su niñera podemita (más cara que los dos cursos de la princesa Leonor). Esos, son los que emponzoñan la democracia en España. El «ente» RTVE encontró las cabezas de turco apropiadas para cesarlas. Ni siquiera, eran de plantilla. Lo suyo hubiera sido la dimisión de los de arriba pero a esos, ya se sabe, no los moverán.