Cannes. Por Ernesto PÈREZ, para SudAméricaHoy
Si una Palma de Oro al mejor film del Festival de Cannes
debe poseer grandes cualidades de estilo, mensaje y actualidad, entonces la del 70º. Aniversario debe por fuerza recaer en el alemán “Aus dem Nichts” (Fuera de la Nada) de Fatih Akin que hoy conmovió a público y crítica con su historia de una mujer que busca justicia para los asesinos
nazis de su marido y de su hijo.
Y, en efecto, en un festival en el que temas de gran actualidad como la
inmigración, la desocupación y el terrorismo aparecieron subrepticia y
esporádicamente, “Fuera de la nada” ha sido
el único que se ha tomado a pecho el tema del racismo que serpentea en las
sociedades más evolucionadas del viejo continente.

Para compensar la fuerza y la convicción del mensaje del film alemán, el
festival ofreció el producto más elegante y refinado de la selección con
“L’amant double” de Francois Ozon sobre una mujer en difícil equilibrio
emocional que cree tener relaciones con su marido y su hermano gemelo.
Katja Sekerci (la bella y políglota actriz alemana Diane Kruger que
raramente habla en su idioma natal) es una mujer feliz. Tiene un marido turco,
que por su amor ha dejado de traficar con la droga, y un hijo de seis años
que son toda su vida.
Hasta que una bomba se la destruye matando a ambos en lo que la policía
cree que es un ajuste de cuentas entre las mafias turca y kurda. Pero Katja
está convencida que el atentado es obra de nazis alemanes y cuando la
pesquisa lo confirma, la mujer cree haber encontrado justicia.
Pero la ley alemana deja libres a los asesinos y Katja buscará hacerse justicia por sí sola. Akin, autor también del guión original, no firma una historia trillada de venganza
privada sino que nos brinda un retrato de vidas humanas destrozadas por
ideologías que parecían superadas y que se alimentan de racismo e
intolerancia.

“L’amant double” de Francois Ozon

Francois Ozon es un director francés que la crítica de su país no ama
aun cuando realiza films de profunda emoción como “Sous la plage”, de
extraordinaria invención narrativa como en “Dans la maison” o de
insuperable refinamiento como en “L’amant double”, inspírado en una
novela de la escritora norteamericana Joyce Carol Oates.
Chloe (Marine Vacth lanzada aquí mismo en Cannes por Ozon en 2015 con
“Jeune et Jolie”) es una ex modelo que sufre trastornos gástricos,
aparentemente sin razón. Un psiquiatra (el belga Jérémie Renier descubierto
por los hermanos Dardenne) la curará y se enamorará de ella y todo es
felicidad hasta que Chloe descubre que su marido tiene un hermano gemelo
idéntico que es también psiquiatra y mantiene con él una relación
sadomasoquista.
Ozon sale airoso en tratar un argumento espinoso, donde los dobles son más
de uno, y sin caer en el ridículo ni exceder en explicaciones
psicoanalíticas. Lo hace con un estilo de extrema elegancia y sofisticación
que puede seducir al presidente del jurado, Pedro Almodóvar.
Mientras tanto y en espera del último film en concurso,
anunció sus premios el jurado de la Semana de la Crítica, reservada a
primeras y segundas, y presidido por el cineasta brasileño Kleber Mendonca
Filho que asignó una doble recompensa al film de su compatriota Fellipe
Gamarano Barbosa “Gabriel e a montanha”, el de Revelación de la emisora
France 4 y el de la Fundación GAN para el distribuidor en Francia.