viernes, 21 de marzo de 2014
La OEA le dio menos de cinco minutos a Corina Machado
La diputada opositora venezolana, Maria Corina Machado

La diputada opositora venezolana, Maria Corina Machado

Washington. Efe/SAH

Si se descuida, la detienen a ella también en Venezuela. La diputada opositora, María Corina Machado, tampoco lo tuvo fácil en Washington con la OEA. Al final, le prohibieron hablar de la situación de Venezuela pero le concedieron menos de cinco minutos para referirse a «la importancia de las mujeres y su participación en política». La sesión, en palabras del embajador de Panamá, Arturo Ulises Vallarino, «produjo verguenza».

Su objetivo era dar a conocer «la voz del pueblo venezolano» al continente para que «abra los ojos» ante la situación en Venezuela. Sus palabras, sin embargo, no pudieron ser escuchadas por la prensa y apenas por unos minutos por los países miembros de la OEA. Nicaragua,con el apoyo de Venezuela y, entre otros países, de Argentina logró que la sesión se realizase a puerta cerrada. Perú y Estados Unidos fueron los que alzaron la voz con más fuerza junto a Panamá para evitar la censura pero perdieron la votación. Maria Corina Machado lo lamentó pero tuvo la palabra casi de modo simbólico y no pudo repetir lo dicho a la prensa, «se están violando todos los preceptos de la Carta Democrática Interamericana».

Machado no logró hoy hacer oír sus denuncias sobre la situación en Venezuela ante la OEA debido a una serie de recursos de procedimiento que le impidieron hacerlo desde el asiento de Panamá, que la acreditó como representante alterna.
Tras más de ocho horas de debate en el Consejo Permanente en la Organización de Estados Americanos (OEA), Machado logró apenas «despedirse y agradecer el espacio» que le proporcionó Panamá antes de que se le arrebatara la palabra y se pusiera fin a la sesión sin que ella hablara sobre Venezuela, según dijo a los periodistas la embajadora de EE.UU., Carmen Lomellín.
No obstante, Machado se mostró satisfecha tras la sesión y precisó que en su breve intervención transmitió su «agradecimiento al Gobierno de Panamá y la garantía y el compromiso de que lucharemos hasta vencer».
«El mensaje quedó aún más claro transmitido con los hechos que con mis propias palabras», afirmó Machado a los periodistas, al subrayar que «se dedicó toda la sesión de hoy a impedir» que ella hablara.
El embajador venezolano ante la OEA, Roy Chaderton, calificó la sesión de hoy como «una ratificación de que la mayoría de países (de la OEA) apoyan la democracia, y Estados Unidos y Canadá a los golpistas».
En declaraciones a los periodistas, Chaderton insistió en que el Consejo Permanente de la OEA no es un espacio para que hablen actores que no pertenezcan a Gobiernos del continente y que Machado «tiene mil espacios para hablar, tiene nada menos que el apoyo del imperio y del subimperio, que es Canadá».
La breve intervención de Machado estuvo precedida de un largo debate sobre si la diputada pretendía referirse o no a la situación en Venezuela, algo que la misión venezolana y otros países afines a Caracas consideraban inaceptable porque ese punto fue eliminado de la agenda para el día durante una votación por la mañana.
El embajador de Panamá, Arturo Vallarino, propuso finalmente que se permitiera a la diputada hablar sobre «la importancia de la mujer y su participación en la política».
Esa propuesta fue recibida con escepticismo de varios países, que consideraron poco creíble que Machado no fuera a referirse a las protestas que vive Venezuela desde el 12 de febrero, y en las que se han registrado hechos de violencia con un saldo de 31 muertos, más de 450 heridos y casi 2.000 detenidos, 121 de ellos aún en prisión.

La diputada opositora consideró horas antes que es «una tragedia» la respuesta que ha dado hasta ahora la OEA a las protestas que vive Venezuela, ante las que el organismo emitió este mes, por 29 votos a favor y 3 en contra, una declaración que llama a continuar el «diálogo nacional» en el país sudamericano. «Es una tragedia, porque la OEA tiene un instrumento poderosísimo, del cual los latinoamericanos, todos en las Américas nos debemos sentir orgullosos, que es la Carta Democrática Interamericana, que establece un compromiso colectivo en la promoción y defensa de la democracia», indicó Machado.

«Es evidente que en Venezuela en el día de hoy se están violando todos los preceptos contemplados en la Carta, como los elementos fundamentales del ejercicio de la democracia (…) y desde luego una violación brutal de los derechos humanos y la represión como política de Estado», argumentó.