jueves, 11 de julio de 2013
De profesión «pedrero»

pedrero

Montevideo. SudAmericaHoy (SAH)

La RAE (Real Academia Española de la Lengua) define al pedrero como al operario que labra piedras. Sin embargo, Suez Machado no se limita a golpear rocas. Este pedrero afincado en Uruguay eleva su oficio a la categoría de arte y trabaja la piedra hasta crear verdaderas piezas de artesanía. A continuación, reproducimos un reportaje sobre Suez Machado, el pedrero más famoso de Uruguay, publicado por Néstor O. Araújo en El País.

En los Cerros de Asperezas, hace 27 años que un pedrero ejerce un oficio duro, para construir postes de piedra, pero también para crear artesanías propias y cumplir con encargos del propio Intendente o la Junta Departamental de Cerro Largo.

A los 52 años de edad, Sued De Souza Machado contó que en su vida elaboró diez mil postes de piedra. También construyó una cruz para el Cementerio de Melo, la base para el monumento a Wilson Ferreira Aldunate y ahora reparará el histórico puente de piedra de la Posta del Chuy.

De carácter silencioso, rudo, vigoroso, el hombre es un pedrero sin firma ni fama, aunque esta última parece que está empezando a rodearlo. Sued habla en portuñol y se lo ve como a un trabajador esforzado, cultor de un oficio casi olvidado.

Los vecinos y amigos de la zona de «Los Cerros de Asperezas», en donde vive hace ya 27 años, lo conocen y llaman «El Pedrero», a secas. «Pedrero es el que le da forma a la piedra sin elaborar», así define su trabajo.

Logra con un enorme esfuerzo y sacrificio cortar postes de piedras, adoquines, ladrillos para el revestimiento de paredes, y realiza artesanías, como las que presentó en Tacuarembó durante la última Fiesta de la Patria Gaucha. «Llevé ceniceros, bateas para alimentar mascotas y un mortero, todo en piedra que yo mismo elaboré en base a granito rosado», dijo orgulloso.

Piquetas y cinceles

«A los 6 años comencé a trabajar con un tío, cerca de Santa María en Brasil, cortando la piedra y haciendo adoquines y postes» dijo Sued. Contó además que aprendió el oficio mirando a su tío trabajar la piedra, aprovechando los afloramientos rocosos del terreno. El movimiento de las piedras implica un gran esfuerzo físico. Aunque todas pueden parecer iguales, cada una sirve para una obra diferente.

El oficio de pedrero es una actividad en la que se usa la mínima tecnología. Las técnicas empleadas han variado muy poco a lo largo de los siglos, y se emplean piquetas, martillos, marras, punteros o cinceles.

Se utilizan punteros de acero cortos, a los que se les llama «milicos», punteros largos, varios martillos y marrones, una regla de acero de dos metros para medir los postes, una fragua para calentar el hierro macizo y afilar los punteros, una bigornia para golpear y hacerle punta a los «milicos» y una batea o lata con agua para templar.

«A una piedra le puede sacar unos 200 postes de dos metros de largo por 15 a 18 centímetros de lado por cara, con aproximadamente 60 kilogramos de peso, con un costo de $ 400 cada uno» comentó.

Sued explicó que en los 27 años que lleva trabajando en la cantera de «Cerros de Asperezas», ya ha vendido cerca de diez mil postes.

«El que más cantidad me compró fue el productor Perdomo, que me pidió 1.500 postes; para cortarlos debí contratar personal», comentó el pedrero. Algunas piedras están enterradas, incluso asoman muy poco encima de la tierra.

Sued afirmó que las empieza a escarbar hasta 3 metros de profundidad para aprovecharlas del todo. Trabaja solo, sin apuros, cuidándose de no quedar apretado y también de las cruceras, que son muy frecuentes. Además, suele cazar algún tatú para comer.

Trabajo

«La venta de postes de piedra ha bajado, esta cantera tiene cerca de 200 años y de estas piedras han salido más de 200 mil postes, una infinidad de adoquines y ahora están encargando piedras cortadas, muy delgadas, en forma de ladrillos, para revestimiento de paredes o estufas, a $ 25 cada uno» señaló. Junto a este trabajo habitual, Sued ha comenzado a recibir encargos de otra índole, que reconocen sus habilidades.

Los ediles departamentales, por ejemplo, le encargaron que cortara una piedra para el pedestal de una imagen que colocarán frente a la Junta, en homenaje a Wilson Ferreira Aldunate.

El intendente Sergio Botana encargó por su parte una cruz de piedra de dos metros de alto, que será colocada en el Cementerio de Melo. «En la tarea de conocer nuestro patrimonio cultural, es que nos propusieron elaborar una cruz de piedra para el cementerio», señaló el pedrero.

Sued se instalará en el Museo de la Posta del Chuy, en donde con asesoramiento de arquitectos e ingenieros aportará todos sus conocimientos para restaurar el histórico puente de La Posta, por donde pasaban las diligencias y se cobraba peaje.

«El puente necesita que le hagamos un mantenimiento en su base, pero siempre manteniendo sus características históricas, » concluyó De Souza.