martes, 11 de marzo de 2014
Un Gobierno de jóvenes figuras y veteranos halcones
Bachelet Chile

Foto. Mario RUIZ (Efe)

Santiago de Chile.SAH/Efe

Le gustan jóvenes y maduros, hombres y mujeres porque lo que de verdad le importa es que sean eficaces y leales y no necesariamente por ese orden. La presidenta chilena, Michelle Bachelet, tomó juramento a los ministros de su gobierno, entre los cuales hay figuras desconocidas que han tenido poca presencia pública hasta ahora junto a «pesos pesado» en carteras clave como Educación, Relaciones Exteriores y Energía.
De los 23 designados con rango de ministro, nueve son mujeres.
El ministro del Interior, Rodrigo Peñalillo, de 39 años, pasó de ser asesor de mayor confianza de Bachelet a  jefe político de su gobierno. Fue su escudero desde el primer Gobierno, casi como una sombra capaz de interponerse entre ella y cualquier persona (incluidos periodistas) que no fueran de su agrado.
Peñalillo ha estado ligado a buena parte de los nombramientos ministeriales, inclusive los fallidos, pues hubo designados para puestos de subsecretario que renunciaron a asumir el cargo debido a la críticas que recibió su nombramiento.
Para tareas altamente complejas, como la reforma a la educación que es un eje central del programa de Bachelet, se eligió al exministro de Hacienda Nicolás Eyzaguirre, un experimentado economista que hasta hace poco tiempo se desempeñó en el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Eyzaguirre es un hábil artífice del equilibrio en las finanzas públicas y deberá manejar los recursos que se recauden a partir de un alza a los impuestos a las empresas para hacer realidad la promesa de educación gratuita y de calidad.
A la cabeza de la Cancillería también está un político de vasta experiencia en relaciones internacionales, Heraldo Muñoz, quien tendrá como misión fundamental fortalecer los lazos de Chile con sus vecinos, particularmente aquellos que fueron dejados más de lado durante el gobierno de Sebastián Piñera, como Brasil y Argentina.
En el área energética, uno de los grandes dolores de cabeza que hereda Bachelet, debido al estancamiento de proyectos e inversiones que amenazan con dejar a «oscuras» al país en poco años si no se toman cartas en el asunto, la labor estará a cargo del empresario Máximo Pacheco.
Tras estar a la cabeza de una de las presidencias regionales de International Paper, Pacheco volvió hace algunos meses a Chile para apoyar a Bachelet e integrarse a su gobierno.
Las finanzas públicas, que Chile en las últimas décadas ha manejado con rigor, estarán a cargo del economista Alberto Arenas, conocedor del área, ya que en el primer mandato de la presidenta ejerció como director de Presupuesto.
Todos ellos se vislumbran como la primera línea de ministros del nuevo gobierno, a los que se suman el portavoz, Álvaro Elizalde, y la ministra secretaria general de la presidencia, la exsenadora Ximena Rincón, encargada de la relación legislativa con el Congreso.
Bachelet, que fue presidenta de 2006 a 2010, incorporó al primer gabinete de su segunda mandato a un miembro del Partido Comunista, Claudia Pascual, en el Servicio Nacional de la Mujer.
En el Ministerio de Defensa estará Jorge Burgos; en Economía, Luis Felipe Céspedes; en Desarrollo Social, María Fernanda Villegas, en Justicia, José Antonio Gómez, y en Trabajo, Javiera Blanco.
Además, Elia Molina se hará cargo de Salud; Alberto Undurraga de Obras Públicas, Paulina Saval de Vivienda y Urbanismo; Víctor Osorio, de Bienes Nacionales; Carlos Furche, de Agricultura; Aurora Williams, de Minería, y Andrés Gómez Lobos, de Transportes.
El gabinete lo completa Pablo Badenier en Medio Ambiente, Natalia Riffo en Deportes y Claudia Barattini en Cultura.