jueves, 29 de septiembre de 2016
La pesadilla continúa


sudamericahoy-columnistas-carmen-de-carlos-bioPor Carmen DE CARLOS

América, de norte a sur, produce personajes insólitos. El continente es capaz de alumbrar una Mis Universo venezolana como Alicia Machado y, en simultáneo (o casi), a un hombre como Donald Trump. En el camino entre uno y otra, saca la cabeza otro nombre de ambición infinita como es el de Hillary Clinton. Estos, por mencionar sólo los que están de moda desde que el tan rico como mezquino Trump, se enfrentara en un cara a cara con la candidata que, pese a todo, debería ganar las elecciones.
Si se impusiera la cordura en los comicios del país que, todavía hoy, muchos habitantes consideran o se refieren a él como al “imperio”, el fracaso de Trump en las urnas sería un golpe tan bochornoso como el que sufre el PSOE en España con un sujeto como Pedro Sánchez, invencible en batir éecords de derrotas e insuperable en sus artimañas para atrincherarse en un puesto que , aunque lo ignore, le han arrebatado con todas las de la ley.
Pero la cordura, en ocasiones, no es lo más común en las sociedades. Salvo que cambien mucho las cosas, la recta final entre Clinton y Trump estará bastante igualada y eso, ya resulta bochornoso para una sociedad que presume de tener universidades fabulosas y talentos en permanente estado de ebullición.
Después de ver el debate, confesar en Estados Unidos que el tipo de la ensaimada (bollo de Mallorca) en la cabeza es tu preferido debería costar lo suyo. Pero parece que en las profundidades de Estados Unidos, donde van a su bola, y en sitios como Miami, están quemados y ya ni colorados se ponen al avivar a Trump.
Dicho esto, reconocer que Hillary “is the one” también debe dar un no se qué entre los que tienen más memoria que la de un puñado de días atrás. La imagen de la señora respaldando los cuernos de su señor esposo (a su lado con la niña) y aquellos argumentos de risa para defender una “relación impropia” pero no “consumada” produce bochorno por lo infantil. Si además le sumamos a la candidata el desgaste político como secretaria de Estado, pues la mujer tampoco parece un lechado de virtudes. Eso sí, mejor que Trump, desde luego.
Entre uno y otra se coló Alicia Machado, una de esas afortunadas mujeres que puede decir que vivió unos cuantos años por la cara. La venezolana, ya entradita en carnes, tuvo que digerir las groserías machistas de Trump y superar –era muy jovencita- el trauma. “Me insultó, ofendió y maltrató en miles de ocasiones durante un año”, recordó. “Estas elecciones –añadió- están siendo una pesadilla porque nunca imaginé que tendría que volver a ver a Trump haciendo comentarios estúpidos y siendo machista y misógino” . Por suerte, su venganza vino por boca de Hillary la misma que se mordió la lengua y apretó los labios cuando le dieron el golpe al impresentable de Manuel Zelaya en Honduras. Eso, por no citar otras cosillas más qu eno hablan bien de ella.

Sin olvidar todo lo anterior, espero que gane Hillary porque si pierde… El mundo será peor y sufriremos algo más que una pesadilla.