viernes, 9 de diciembre de 2016
Gobierno Macri, más dudas que certezas

El presidente de Argentina, Mauricio Macri

Por Raúl OCHOA
¿Qué fue CAMBIEMOS en su primer año de gobierno?
– Una gran mejora institucional, respeto por las opiniones ajenas, aceptar sugerencias y proyectos de la oposición, capacidad de reconocer errores y rectificarse frente a la opinión pública, abrirse nuevamente al mundo – del que nunca debíamos habernos aislado -, mejorar sustancialmente las relaciones con todos los países vecinos, sanando viejas heridas y vejaciones.
– En el plano económico social, resolver exitosamente el cepo cambiario, deudas con hold outs, capear con solvencia la trampa abierta del dólar futuro, llevar adelante un delicado equilibrio entre provocar un declive perceptible inflacionario, una apreciación cambiaria razonable y una actividad productiva menguante pero controlable, mantener un diálogo abierto y franco con todas las administraciones provinciales e inclusive con las intendencias del conurbano bonaerense que representan alrededor del 35 % de la población total del país, sobrellevar el gravísimo problema de un 32 % de población pobre con 46 % de empleo informal que está representado a través de un entramado de organizaciones sociales de muy difícil manejo y de elevada conflictividad, mantener con los sindicatos canales siempre abiertos e intentar a través de resolver sus demandas insatisfechas de la época- algunas muy onerosas – una suerte de modus vivendi

No es poco lo hecho e intentado, pero en varios planos a veces daría la impresión que más que “cambiar” es “continuar” con buenos modales. Es cierto que esta experiencia que estamos viviendo de gobierno en minoría en ambas cámaras, con pocos gobernadores propios y aliados, con una justicia muy compleja donde la grieta dejada por la impronta K se nota permanentemente es inédita y puede ser para una porción significativa de la opinión pública desgastante y aparentemente ineficaz acostumbrada como se estaba a la existencia de un solo Poder del cual emanaban las decisiones
Sin embargo, es justamente teniendo en cuenta estas cuestiones objetivas y la herencia recibida que se pueden enmarcar y señalar errores y omisiones de CAMBIEMOS que ahora se reflejan en el “Más dudas que certezas” del título

En primer lugar, explicitar la profundidad de la crisis y del daño estructural ocasionado, porque no se puede dejar de lado que la Administración K desperdició la mejor oportunidad histórica desde 1880-1914 – boom de los commodities mediante – para transformar a la Argentina en un país moderno e integrado interna y externamente; en vez lo dejó sin activos (infraestructura, energía y educación) sin inversiones con 15 % más de gasto público a PBI y la mayor carga tributaria de la historia, con atraso cambio, cepo y deudas externas sin pagar. Esto no se hizo y ha sido un error enorme

Reunión de Gabinete de Mauricio Macri. Foto. Presidencia

En segundo término y puede ser una continuación del primero se organizó al Poder Ejecutivo con una inmensa estructura pasando de 12 a 22 ministerios con jefe de gabinete y dos subjefes y por supuesto infinidad de secretarias y subsecretarias, con sus respectivos jefes y asesores (tanto es así que la primera reunión ampliada de ministerios se llevó a cabo en Tecnópolis por la necesidad de espacio) Este diseño mas de época de bonanza, es lo contraindicado para tener unidad en la acción y responder con eficacia y eficiencia al número muy importante de cuestiones que requieren pronta respuesta y velocidad de ejecución

Si bien se optó por un enfoque gradual frente a la dimensión del problema fiscal – gasto público/presión tributaria excesiva/alto déficit- ser gradual y no de shock implica bajar más lento el déficit, pero no subirlo que es lo que arrojan las cuentas para el 2017. Si tenemos problemas con los movimiento piqueteros y se presenta una ley para crear 1 millón de puestos de trabajo de cooperativas, la solución no pasa por darle 30.000 millones de pesos, asegurarles la incorporación de cooperativas y otorgarles derechos formales a trabajo informal, sino trabajar con ellos para evaluar cómo y en qué condiciones y conque capacitación podrán irse incorporando al trabajo formal, de otra manera no los piqueteros si no la Argentina no tendrá futuro

Es muy difícil gobernar la Argentina, porque mirado desde el punto de vista histórico el populismo que hoy campea en el mundo desarrollado ya pasó por aquí desde hace mucho tiempo y dejo una impronta de inmediatez y de cortoplacismo que es casi una marca indeleble. Y de eso se trata y tratará el futuro de nuestro país.

 
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