domingo, 27 de diciembre de 2015
Río de Janeiro recibirá al año de sus Juegos Olímpicos con 2.000 tambores

Río de Janeiro, 27 dic (EFE).- La tradicional fiesta de fin de año en la playa de Copacabana se centrará en los Juegos Olímpicos que Río de Janeiro organizará en 2016, pero contará además con 2.000 tambores de escuelas de samba, según adelantó hoy el diario O Globo.
El atronador sonido de los tambores será amplificado por treinta torres de sonido distribuidas a lo largo de los cuatro kilómetros de la playa de Copacabana y evocará el centenario del primer registro oficial de una composición de samba, que se cumplirá el 27 de noviembre de 2016.
El 27 de noviembre de 1916 los compositores Ernesto dos Santos «Donga» y Mauro de Almeida registraron como de su autoría la canción «Pelo Telefone» (Por el teléfono), considerada como el primer samba de la historia y grabado unos meses después, poco antes del Carnaval de 1917.
La noche del próximo jueves, cuando se calcula que más de un millón de personas se apiñarán en Copacabana para recibir a 2016, los tambores resonarán en la parte final de un espectáculo de fuegos artificiales que se prolongará durante 16 minutos.
La pirotecnia estará a cargo de la empresa española Igual, que ha anunciado que usará 34.000 bombas de trece colores diferentes con los Juegos Olímpicos como motivo principal de la fiesta.
Los responsables de Igual comenzaron a preparar este sábado las ocho balsas desde las que serán lanzados los fuegos artificiales, que serán instaladas a unos 400 metros de la playa por cuestiones de seguridad.
Según O Globo, cuando los fuegos estallen representarán diversas figuras relacionadas con los Juegos Olímpicos, que serán celebrados en Río de Janeiro entre el 5 y el 21 de septiembre de 2016.
La música elegida para los primeros momentos de pirotecnia estará relacionada también con el evento deportivo e incluirá temas del artista estadounidense John Williams, autor de varias fanfarrias olímpicas, y la canción de la película «Carros de Fuego», del griego Vangelis considerada uno de los himnos oficiosos de los juegos.
A la espera de la que, junto con el Carnaval, es la fiesta más multitudinaria de Río de Janeiro, miles de personas se volcaron hoy a las playas de la ciudad espoleadas por una temperatura que en las primeras horas de la mañana llegaba a 35 grados, con una sensación térmica cercana a los 40 grados.