martes, 31 de octubre de 2017
«Cuernavaca», Alejandro Andrade Pease seduce a Carmen Maura


Roma. Por Ernesto Pérez, para SudAméricaHoy
Una historia de formación de un adolescente que, privado
repentinamente de su madre y con un padre fugitivo, debe afrontar por sí solo el mundo de los adultos, es el tema del primer largometraje del hasta ahora director televisivo mexicano. Alejandro Andrade Pease, “Cuernavaca”, presentado en premiere europea en la sección oficial de la 12a. Fiesta del
Cine de Roma.
Inspirado en un personaje de su infancia, la propia abuela que como en el
film esconde secretos y que aquí es interpretada por una gran Carmen Maura,
Andrade Pease cuenta la historia de Andy, un adolescente aún apegado a las
faldas de su madre, cuya vida sufre un vuelco cuando está es muerta en un
asalto y debe irse a vivir con su abuela, en la casa donde ésta vive en
Cuernavaca con su hija down.
Ante la ausencia de una figura paterna, Andy centrará todo su afecto en
el hijo del jardinero que lo usa para poder entrar en la casa de la anciana
para robarle. Cuando finalmente su padre reaparece, Andy deberá suplir la falta de
responsabilidad de su progenitor, en un rol de adulto para el que no estaba
preparado.
Presentado con éxito en el pasado festival de Cartagena (Colombia) pero
aún inédito en su país, “Cuernavaca” muestra el pulso firme de un joven
director que controla perfectamente su oficio, empezando con la dirección de
actores y más específicamente la del joven debutante, Emilio Puente, al que
hacen de contorno profesionales de notable trayectoria como Maura y Moisés
Arizmendi en el rol del padre ausente.
“La historia nace de recuerdos de mi infancia y sobre todo de mi abuela
que era también una señora que escondía secretos y trataba de dar una
imagen perfecta de si misma, mientras se ilusionaba con que los muros de su casa eran lo bastante altos como para dejar afuera la violencia del mundo
exterior”, declaró el director en rueda de prensa con sus dos actores.
“Yo vivía en ese momento en Madrid y modelé el personaje de la abuela
en Carmen Maura que aceptó venir a rodar en México – contó Andrade Pease –
pero lo que me interesaba sobre todo era crear un personaje que se fuese
formando y transformándose delante de los ojos del espectador”.
“Porque Andy, que empieza el film apenas entrado en la adolescencia pero
aún muy apegado a su madre y necesitado de alguien que lo guíe y lo proteja,
al final deberá suplir la falta de la figura paterna convirtiéndose en padre
de su propio padre” continuó el novel director.
“En México el dolor y el miedo generan violencia que a su vez generan
más dolor y miedo en un círculo vicioso, una espiral que parece
inacabable”, asegura Andrade Pease.
El director conviene que lo más difícil en cine es dirigir niños y
animales «y yo no solo tenía tres de los primeros, uno de ellos down, más
una infinidad de gatos y hormigas. Pero qué me dicen si a esto se agrega un
monstruo sagrado como Carmen Maura”, bromeó el director.
“Uno de los cineastas que yo más admiro es Luis Buñuel que también
tenía una obsesión con las hormigas, como ya se advierte en su primera
película, ‘Un perro andaluz’ pero también tengo una devoción con los
tres directores mexicanos que nos representan en el extranjero, Alejandro
González Iñárritu, Alfonso Cuarón y Guillermo del Toro, pero mi cine no se
parece en nada, ni quiere parecerlo, al de ellos” agregó el cineasta.
“Lo que sí reconozco es la influencia en esta película de otros
directores, como François Truffaut del que debo haber visto ‘Los 400
golpes’, que también era su ópera prima, por lo menos diez veces mientras
escribía el guión y quince mientras montaba. Y también me han influido,
aunque en menor medida, ‘’La infancia de Iván’ de Andrei Tarkovsky y
‘Mouchette’ de Robert Bresson” señala Andrade Pease.
“Porque yo creo, como el chileno Raúl Ruiz, que más que en las escuelas
se aprende cine viendo las grandes películas del pasado” concluyó.