viernes, 15 de julio de 2016
Mario Montalbetti, realidad es mensaje

victor vich

VictorVich_150x150.originalPor Victor VICH

La poesía de Mario Montalbetti usa un lenguaje coloquial, pero no es coloquial ella misma. Su opción por este lenguaje -y por mostrar un conjunto de hechos de la vida ordinaria- no va de la mano con la opción hacia un discurso que opte por salirse de la tradición literaria. En realidad, al ingresar con tanta fuerza al lenguaje coloquial, al identificarse tanto con él, al observarlo tan a fondo, Montalbetti solo descubre su radical condición simbólica, su carácter siempre espectral. Digamos que la opción por el coloquialismo no conduce, en este caso, a la calle, sino al símbolo. 

El punto es que sumergirse a fondo la realidad no conduce a la opción positivista. ¿Por qué? Porque vivimos al interior del lenguaje y (como sabemos) el lenguaje no lleva a la cosa, sino al símbolo.Identificarse con la realidad, con el lenguaje, parecería entonces conducir hacia otro lado. ¿A dónde? A la crítica misma de la realidad y a la propia critica del lenguaje. Por eso, este es un libro cuya voz, desconcertada, intenta repensar algunos fundamentos básicos de la experiencia en el mundo.

¿Qué es el sujeto? se preguntan muchos poemas. Es algo sin comienzo, es un comienzo no determinable, responden. Más aún, un sujeto no es la suma de sus actos, sino más bien la acumulación de todo lo no realizado: el sujeto es el resto que queda luego de los actos mismos. ¿Qué es el lenguaje? se insiste otra vez. El lenguaje es siempre algo a destiempo, un desierto sin significado, la arquitectura de un permanente no entender. ¿En qué se ha convertido la sociedad que vivimos? En un cielo post-constelaciones, en una imposibilidad de hacer el amor, en una crema de papa a la huancaína con el logo de la Conferencia Anual de Ejecutivos (y de Prom-Perú, seguro.)

Montalbetti insiste, intenta traducir, aunque conozca los límites impuestos. Con un lenguaje roto, con las imágenes suspendidas, con la falla inevitable, estos versos vuelven al ataque. ¿Qué es la sociedad? Una lata oxidada de aceite de oliva. ¿Qué es el lenguaje? Un intenso dolor en el abdomen. ¿Qué es el sujeto? Una pausa: el problema es que ya no vemos un sujeto. Ahora somos simios; simios, otra vez. (La Mula)