miércoles, 2 de septiembre de 2015
Industriales brasileños se quejan de perder mercados ante China, según sondeo

Río de Janeiro, 2 sep (EFE).- Los industriales brasileños se quejan de que están perdiendo participación en el mercado interno por el aumento de las importaciones procedentes de China así como en el externo por no poder competir con los productos chinos en otros países, según un sondeo divulgado hoy por la patronal del sector.
El porcentaje de industriales brasileños que alegan haber perdido participación en el mercado interno por las crecientes importaciones de productos fabricados en China subió desde el 14 % en 2010 hasta el 16 % en 2015, reveló el sondeo de la Confederación Nacional de la Industria (CNI).
Esa pérdida es mayor para sectores como el de fabricantes de textiles, el 39 % de los cuales dice haber perdido mercado frente a los productos chinos, metalurgia (39 %), confecciones (36 %), informática (35 %) y máquinas y equipos (32 %).
El porcentaje de los industriales brasileños que afirma haber perdido participación en el mercado externo por no poder competir con China subió desde el 7 % en 2010 hasta el 11 % este año.
El sondeo de la patronal, que escuchó el mes pasado a presidentes y ejecutivos de 2.146 empresas de 15 sectores industriales, no tiene en cuenta el mercado que aún puede ganar China en los próximos meses tras la decisión de Pekín de promover en agosto una fuerte devaluación del yuan frente al dólar.
La devaluación china no solo redujo el precio de los productos importados por Brasil desde China sino que aumentó la competitividad de las exportaciones chinas hacia otros países frente a las brasileñas.
Según el sondeo, el 54 % de las industrias brasileñas afirma que, como exportador, compite con las chinas en el mercado internacional y un 5 % tiene planta propia en China o contrata empresas de ese país para producir.
La CNI alega que Brasil tiene que aumentar su competitividad para que las industrias no sigan perdiendo espacio ante los productos de otros países tanto en el mercado nacional como en el internacional.
«La Confederación le entregó al Gobierno este año 120 propuestas de bajo impacto fiscal que pueden mejorar el ambiente de negocios del país y la capacidad de competición de las empresas brasileñas», según un comunicado.
El principal objetivo de tales medidas es reducir los precios de producción en Brasil y simplificar la burocracia, lo que, para los industriales, puede generar beneficios para las empresas a corto plazo.
«El ajuste fiscal (anunciado por el Gobierno) es necesario, pero necesitamos avanzar en la agenda de la competitividad. En este momento hay que dar prioridad a las inversiones en infraestructura por parte del sector privado, a la reducción de la burocracia y al estímulo a las exportaciones», dijo el gerente de Competitividad de la CNI, Renato de Fonseca, citado en el comunicado.
De acuerdo con el dirigente gremial, esas medidas pueden ser adoptadas de inmediato sin aumentar los gastos públicos.
La producción del sector industrial, el más afectado por la actual crisis económica en Brasil, se redujo en un 6,6 % en los siete primeros meses de este año en comparación con el mismo período de 2014, de acuerdo con datos divulgados hoy por el Gobierno.
Esa contracción es atribuida a la propia situación económica de Brasil, que enfrenta una caída generalizada del consumo en un ambiente de recesión económica, inflación en alza, tasas de interés altas y restricciones al crédito.
Según datos divulgados la semana pasada por el Gobierno, Brasil enfrenta una recesión técnica tras haber registrado una caída del PIB del 1,9 % en el segundo trimestre frente al primero, con lo que acumuló dos trimestres consecutivos de crecimiento negativo.