Asunción, 15 sep (EFE).- Agentes de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) hallaron hoy en una vivienda de Canindeyú (este) 650 kilogramos de marihuana prensada y preparada para ser cargada en cajas de cigarrillos de la marca Palermo, propiedad de la tabacalera del presidente de Paraguay, Horacio Cartes.
La operación se realizó en un lugar de acopio de marihuana, a la altura del kilómetro 252 de la ruta 10, a cinco kilómetros de la entrada principal a la ciudad de Curuguaty, del departamento de Canindeyú, informó a Efe el fiscal departamental, Cristian Royg.
Además de la marihuana, los agentes encontraron 35 cajas de cigarrillos de la marca Palermo, donde supuestamente se iba a camuflar la droga para ser transportada hasta la frontera con Brasil, ubicada a 170 kilómetros del lugar donde se realizó la intervención.
El fiscal explicó que ya en otros departamentos del país, como San Pedro (norte), es habitual encontrar drogas ocultas en cajas de cigarrillos y otros productos, donde se camuflan para pasar mas fácilmente los controles fronterizos.
«Lo llamativo es que usaran cajas de cigarrillos de Tabacalera del Este, marca Palermo. Vamos a comprobar la numeración y a pedir los informes correspondientes», afirmó.
Royg detalló que las cajas encontradas no tenían los precintos de seguridad de fábrica, por lo que se presume que fueron compradas y vendidas por una organización criminal.
El presidente paraguayo, Horacio Cartes, es dueño de un emporio de empresas, incluida la Tabacalera del Este S.A. (Tabesa).
Paraguay es uno de los países latinoamericanos donde se origina una gran parte del contrabando de cigarrillos hacia Brasil, México y Colombia, entre otros, y también el que tiene impuestos más bajos para el tabaco a nivel regional.
Además, se trata del principal productor de marihuana de Suramérica, mientras que Brasil es el principal destino de esa droga.
Con plantaciones que ocupan unas 6.000 hectáreas, las organizaciones de narcotráfico de la región exportan al año desde Paraguay unas 20.000 toneladas de marihuana, el 80 por ciento de ellas a Brasil, el resto a Argentina, Uruguay y Chile, donde puede alcanzar los mil dólares.
El cultivo de marihuana a gran escala es una realidad cotidiana en algunas de las comunidades campesinas más pobres de Paraguay, donde la yerba se ha convertido en el único producto de renta que permite a los labriegos obtener carne y otros alimentos básicos.