EL VIDEO
Discurso de Gabriel Boric
Bogotá, 14 oct (EFE).- La economía colombiana crecerá un 2,8 % en 2016 debido a una caída de los ingresos del país ante los bajos precios del petróleo, la moderación en la inversión y el menor crecimiento de la demanda, según las previsiones presentadas hoy por Bancolombia, que rebajó sus expectativas desde un 3,1 %.
Los precios de crudo, que han fluctuado en el último año entre los 45 y los 50 dólares, tendrán una «recuperación muy leve» para 2016, lo que podría llevar a una moderación en los niveles de inversión y gasto en el país, dijo el gerente de investigaciones económicas de Bancolombia, Juan Pablo Espinosa.
Detrás de la bajada de los precios del crudo está la «sobreproducción» internacional que «implica una acumulación de inventario en el mercado petrolero que no se va a resolver pronto», agregó el analista en un encuentro con la prensa.
Este hecho prolongará la tendencia a la baja que registra la cotización del crudo en el mercado internacional desde mediados del 2014 y que ha supuesto un declive en los ingresos de Colombia, ya que la mitad de sus exportaciones son petróleo, por lo que el Gobierno tendrá que buscar otras «fuentes de ingreso alternativas», sugirió el economista Alexander Riveros.
Al mismo tiempo, la caída de los ingresos desequilibra la balanza de pagos de Colombia, que cerrará este año con un déficit en cuenta corriente del 6,2 % del producto interior bruto (PIB), porcentaje que Bancolombia prevé que descienda hasta el 5,3 % para 2016.
En opinión de Riveros, ante este escenario, el Gobierno del presidente Juan Manuel Santos «tiene que hacer un ajuste importante» en el presupuesto, con el propósito de cumplir las metas fijadas para 2018 y 2022.
Igualmente, el menor crecimiento económico producirá una desaceleración en la creación de empleo para el año entrante, aunque se mantendrá en un dígito.
A nivel urbano, la entidad financiera espera una subida del desempleo de dos décimas que puede llegar a pasar del 9,2 % de este año al 9,4 % previsto para 2016, mientras que en el ámbito nacional puede aumentar cuatro décimas hasta el 8,9 %.
Por otro lado, la coyuntura económica regional tampoco es favorable porque, según Espinosa, desde 2010 hasta 2014 los clientes internacionales del país «han venido creciendo cada vez menos».
Otro tanto representará la devaluación del 41 % que ha sufrido este año la moneda local con respecto al dólar estadounidense, que, según los expertos de Bancolombia, se mantendrá el próximo año en un promedio de 3.056 pesos colombianos, ante una previsible subida de las tasas de interés por parte de la Reserva Federal de EE.UU.
El alza de los productos importados a raíz de la devaluación del peso y situaciones como el fenómeno de El Niño impulsarán la inflación por encima del rango meta del Banco de la República (emisor), que terminará este año en 5,73 %, anticipó Bancolombia.
De ese total, un 2,06 % corresponderá a los alimentos, un grupo vulnerable a cualquier tipo de variabilidad climatológica, aunque en 2016 el costo de la vida bajaría hasta el 3,7 %.
«El consumo de los hogares crecería a un ritmo de 3 % este año y 2,8 % en 2016, tasas inferiores al 4,4 % que se presentó el año anterior», añadió el informe.