EL VIDEO
Discurso de Gabriel Boric
Montevideo, 27 oct (EFE).- Las denuncias por pornografía infantil en Uruguay aumentaron de unas 400 registradas durante 2014 a 500 en lo que va de este año, con 22 procesamientos en 2015 frente a 19 en todo el periodo anterior, según datos divulgados hoy por el Ministerio del Interior del país suramericano.
La baja tasa de procesamientos en relación con las denuncias se debe a que las redes sociales, desde donde se realiza la mayoría de estos delitos, «son extranjeras», sostuvo Winston Rodríguez, encargado de la división de Delitos Informáticos de la Dirección General de Lucha contra el Crimen Organizado e Interpol de Uruguay.
Por este motivo, a criterio del jerarca, «los procesos (para probar los delitos) son largos» y difíciles.
El especialista en delitos informáticos resaltó la importancia de la prevención «desde la casa» y las familias respecto al «uso que los menores hacen de las tecnologías».
Para evitar que los menores sean víctimas de pedófilos, la familia «debe estar atenta por si algunos de los chicos se encierran en un cuarto con una tablet o computadora», agregó Rodríguez, quien explicó que los delincuentes crean perfiles en las redes desde los cuales atraen «la atención y la confianza del menor».
A partir de las interacciones en las redes, surgen modalidades delictivas que preocupan especialmente a las autoridades, como el «grooming», en la que los menores son seducidos «para ingresar a la prostitución» por pedófilos extranjeros, que les giran el dinero para desplazarse del país.
Entre las modos de operar de los pedófilos, se destaca también el delito de «sextorsion», que se da «cuando un perfil intercambia fotos con otro y de ahí se empieza a extorsionar y amenazar» para seguir manteniendo el intercambio, explicó Rodríguez.