Jerusalén, 27 dic (EFE).- La viceministra israelí de Exteriores, Tzipi Hotovely, instó hoy a Brasil a aceptar el nombramiento del exdirigente colono Dani Dayán como embajador de Israel, porque, aseguró, su país no tiene intención de enviar a otro candidato.
«Nunca ha habido una situación en la historia de Israel que un embajador no haya sido aceptado por sus posturas ideológicas», se quejó la viceministra en declaraciones al Canal 10 de la televisión israelí, en la que habló de una posible «crisis».
En una entrevista en directo, Hotovely pidió indirectamente al gobierno de la presidente brasileña, Dilma Rousseff: «Aceptadlo porque de lo contrario se trataría de una crisis entre dos países y mejor no llegar ahí».
De 60 años y ex presidente del Consejo de Judea y Samaria, nombres bíblicos por los que en Israel se conoce el territorio ocupado de Cisjordania, Dayán es uno de los catorce nombramientos políticos del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, en el servicio exterior del Ministerio de Exteriores.
El Gobierno israelí refrendó el nombramiento en septiembre, aunque desde entonces el de Brasil no ha respondido positivamente y en mensajes despachados en la máxima confidencialidad ha aclarado que preferiría a otro candidato que no representara a la colonización judía.
«No puede ser que veten a Dayán solo por el hecho de que sea un colono», agregó Hotovely, quien atribuyó el retraso a la «crisis política» y a la «paralización diplomática» que hay actualmente en Brasil.
Aún así, se mostró profundamente consternada por la posibilidad de un veto de carácter «ideológico» y aseguró que de no ser aprobado su país dejará la legación diplomática al mando del número 2.
El anterior embajador, Raed Mansour, regresó a Israel la semana pasada.
La jefa en funciones de la diplomacia israelí -el cargo lo ejerce el propio primer ministro- reveló que ha tenido hoy una reunión con Netanyahu y con altos funcionarios ministeriales para estudiar la situación y los próximos pasos de Israel.
Según la viceministra, hasta ahora su país ha gestionado el problema de forma «discreta», pero adoptará a partir de ahora «herramientas alternativas» públicas, entre ellas apelar a los medios de comunicación y todo tipo de dirigentes.
«Todo Estado soberano tiene el derecho de designar al embajador que quiera y si es una persona respetable, y Dani Dayán ha obtenido el apoyo de todo el espectro político (israelí)», recordó al mencionar el apoyo que le dio la oposición cuando surgieron las primeras críticas en Brasil.
«Dayán es un embajador legítimo», insistió al restar importancia a la postura de Brasil, por considerarla en este caso irrelevante, sobre la colonización judía del territorio palestino.
Hoy, en un mensaje en twitter, el propio Dayán hacía resumen del año diciendo con ironía: «Ha llegado el momento de comenzar a hacer balance sobre 2015. He tenido logros importantes. En enero conseguí no ser diputado y en diciembre he conseguido no ser (por ahora) embajador (sic)».
Se refería a que en las últimas elecciones generales israelíes no consiguió entrar en el Parlamento y a los impedimentos en su nombramiento como embajador en Brasil.
Consultado hoy por Efe, Dayán declinó hacer cualquier comentario sobre su nombramiento, aunque el sábado dijo en una serie de entrevistas con medios locales que «habría que haber actuado antes».
«No se trata de si yo soy embajador en Brasil o no. De alguna manera yo lucho para que 700.000 israelíes que viven en Judea, Samaria y Jerusalén Este puedan representar a Israel», subrayó.
En otra entrevista manifestó que en su opinión no se trataba de un asunto entre dos países, sino un ejemplo clásico de las actuaciones del movimiento BDS, que exhorta al boicot internacional y la desinversión en Israel.
Y comparó su caso con la exigencia europea a Israel de «marcar en origen» la producción de los asentamientos judíos.
«Poner etiquetas a personas es peor que poner etiquetas a productos», concluyó.