Montevideo. Por Jorge FIGUEROA/Efe/SAH

Los jóvenes de 16 años serán tratados, a efectos penales, como lo que son, menores de edad. Los uruguayos rechazaron en las urnas una reforma de la Constitución que tenía por objetivo rebajar la edad de imputabilidad penal de 18 a 16 años en medio de la generalizada preocupación en el país por la seguridad pública. El apoyo a la propuesta planteada recibió un 46 % de los votos válidos pero necesitaba superar el 50 % para ser aprobada.

Los uruguayos debieron definir en las urnas el tema de manera simultánea a las elecciones presidenciales y legislativas que se celebraron en la jornada con voto obligatorio.
De acuerdo a las cifras de la Corte Electoral, con el 19,3 % del total de 6.948 circuitos escrutados los votos a favor de la reforma constitucional llegaban a 206.228 de los 2.620.235 habilitados para votar.
El candidato a la Presidencia de la gobernante coalición de izquierda Frente Amplio, el expresidente Tabaré Vázquez (2005-2010), que resultó el más votado aunque sin obtener la mayoría para ganar en primera vuelta, se congratuló del resultado en contra de la reforma constitucional.
«Para regocijo de todos nosotros los uruguayos le dijeron no a la baja de la edad de imputabilidad», afirmó Vázquez en su discurso de agradecimiento por el apoyo recibido en las urnas.
Fuentes de la comisión por el «No a la baja» aseguraron que los uruguayos escribieron hoy una nueva «página dorada» en «favor» de la democracia.
A los jóvenes uruguayos «se le debe dar alternativas» para lograr una «convivencia pacífica» en el país y no «encarcelarlos cada vez con menos edad».
Los niveles de exclusión del sistema educativo formal, la segregación en el tema vivienda, la falta de propuestas promocionales, la explotación sexual y la violencia doméstica, entre otros, afectan a muchos adolescentes uruguayos y los empujan al límite de la delincuencia, afirmaron.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), la pobreza en Uruguay tiene «cara de niño» y el 37,8 % de los menores de 6 años vive en hogares cuyos ingresos no alcanzan a satisfacer sus necesidades básicas.
En Montevideo, donde reside la mitad de los 3,4 millones de habitantes del país, la incidencia de la pobreza en el tramo de edad inicial alcanza a 44,1 % y llega a 43,7 % en los niños de entre 6 y 12 años.
La comisión destacó el apoyo que recibieron desde organizaciones nacionales e internacionales, entre ellas Unicef y la Organización Iberoamericana de la Juventud (OIJ), en contra de la rebaja de la edad de imputabilidad.
Entre las personalidades del país que se opusieron públicamente a las penas de cárcel para los menores a partir de los 16 años figura el seleccionador de fútbol y coordinador de las selecciones juveniles, Oscar Washington Tabárez, que goza de gran prestigio en el país y que en su juventud fue maestro escolar.
Las organizaciones que apoyaron el «No a la baja» destacaron la reciente recomendación de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) donde exhorta a que «los Estados tiendan a abolir la pena privativa de la libertad aplicada a niños, niñas y adolescentes».
El candidato a la presidencia del Partido Colorado, Pedro Bordaberry, que fue el principal impulsor de la reforma de la Constitución para rebajar la edad de imputabilidad y endurecer las penas a los menores responsables de delitos graves, dijo que aproximadamente 1.000.000 de uruguayos apoyaron hoy en las urnas su iniciativa.
«La voz de esa cantidad de gente debe ser escuchada», afirmó Bordaberry en el discurso en que reconoció su derrota como aspirante a la Presidencia.
Esos uruguayos «piden y reclaman» que el Estado «los proteja» y que el Gobierno tome medidas para «volver a vivir en paz», afirmó.
Uruguay cuenta con aproximadamente 260.000 adolescentes (de entre 13 y 18 años), de los cuales menos de 1.000 están comprometidos con la ley penal por infracciones que han cometido. Actualmente 350 se encuentran en programas de privación de libertad.