miércoles, 8 de julio de 2015
De la Rúa dice en juicio por muertes en crisis de 2001 que no hubo represión

Buenos Aires, 8 jul (EFE).- El expresidente argentino Fernando de la Rúa (1999-2001) aseguró hoy que no hubo represión el 20 de diciembre de 2001, su último día de Gobierno, cuando cinco personas murieron y otras 117 resultaron lesionadas durante las manifestaciones de protesta frente a la Casa de Gobierno.
El exmandatario declaró hoy en calidad de testigo ante el tribunal oral que enjuicia a un exfuncionario y varios expolicías por la represión desatada aquel día en la Plaza de Mayo de Buenos Aires ya que el expresidente, inicialmente procesado en el caso, fue exculpado por un fallo avalado por el Supremo.
Los jueces que escucharon hoy el testimonio de De la Rúa han sentado en el banquillo de los acusados al exsecretario de Seguridad Enrique Mathov, al exjefe de la Policía Federal Rubén Santos y a otros quince expolicías por el asesinato de manifestantes que protestaban contra el Gobierno el 20 de diciembre de 2001.
«No se deben a la policía, a ningún operativo, ni al gobierno porque no hubo ningún plan de represión», dijo el expresidente al referirse a los manifestantes asesinados.
De acuerdo al testimonio de De la Rúa, difundido por el portal oficial Infojus Noticias, quien daba las órdenes a la policía sobre el operativo en la Plaza de Mayo era la jueza federal María Servini de Cubría.
El exjefe de Estado, de 77 años, relató que le dijo a su entonces ministro del Interior, Ramón Mestre, que siguiera las órdenes de la magistrada: «Yo le dije a Mestre que actuara y obedeciera lo que dijera la jueza».
El exmandatario afirmó que la magistrada «ordenó actuar a la policía» en la tarde del 20 de diciembre y «ordenó desalojar» parcialmente de manifestantes la Plaza de Mayo, frente a la sede del Ejecutivo argentino.
El exjefe de Estado dijo que Mathov no estuvo al frente de ese operativo sino que en aquellas horas se ocupó de las comunicaciones con los gobernadores de diferentes provincias «que pedían refuerzos de seguridad».
Además, sobre el comisario Santos, dijo no haber hablado con él ni haberlo visto ese día en la Casa Rosada.
De la Rúa, que renunció en la noche del 20 de diciembre y se retiró en helicóptero desde la azotea de la Casa de Gobierno, dijo ante los jueces que se enteró de que había muertos en la Plaza de Mayo una vez que llegó a la residencia presidencial de Olivos y Mathov se lo comunicó por vía telefónica.
«Primero me dijo que había dos fallecidos y después que ascendían a cuatro», declaró.
Insistió en que desde el Gobierno «no salió ninguna disposición» hacia las fuerzas de seguridad porque, según él, «todo estaba bajo la acción y control de la jueza» Servini de Cubría.