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Discurso de Gabriel Boric
(ACLARACIÓN A ABONADOS: prohibida su publicación en Argentina por la veda electoral)
Aldana Vales
Buenos Aires, 24 oct (EFE).- La falta de información y el desconocimiento del electorado sobre el proceso dominan la previa de la primera elección directa de diputados argentinos al Parlamento del Mercosur (Parlasur), que se celebrará mañana junto a los comicios presidenciales.
La elección directa de estos parlamentarios fue establecida por una ley del Congreso argentino en diciembre de 2014, pero los electores del país suramericano en la práctica aún hoy desconocen qué estarán votando realmente.
Argentina tiene actualmente 18 miembros en el Parlasur, representantes elegidos por su Congreso nacional que llevan adelante una tarea más consultiva que con influencia concreta en los países.
Tras la experiencia en Paraguay, el primer país del Mercosur en elegirlos por voto popular, Argentina tiene previsto enviar a este órgano legislativo 43 representantes que saldrán de las elecciones del próximo domingo y que asumirán su mandato en diciembre.
Cada una de las 23 provincias argentinas y la ciudad de Buenos Aires enviará un diputado, mientras que los 19 parlamentarios restantes saldrán de una lista nacional que se elegirá en forma proporcional con el sistema D’Hondt.
Sin embargo, un profundo desconocimiento sobre las tareas que desempeñarán estos diputados reina todavía en la ciudadanía.
El diputado Alberto Asseff, del peronismo disidente, actual representante de Argentina ante el Parlasur, considera que existe en el país una «mala imagen» de la institución, que adjudica a «fundados motivos», a «prejuicios» y a «deliberadas intenciones de desacreditarla».
«Si el Parlasur no existiera habría que crearlo inmediatamente. Cualquier proceso de integración necesita de un ámbito institucional para deliberar y lograr consensos», sostiene.
Las principales críticas han apuntado a la inmunidad que se había previsto para los representantes de Argentina en el Parlasur, duramente cuestionada por la oposición, que recurrió a la Justicia y logró que se eliminara este fuero especial.
Según Leandro Querido, de Transparencia Electoral, «la sensación que uno tiene es que no hay conocimiento por parte de la ciudadanía», que, de todas formas, concentrará su atención en la categoría de candidatos a la Presidencia.
Querido consideró que la ley que establece las elecciones directas de estos diputados en Argentina constituye «el ejemplo más acabado de abuso electoral» y advirtió que las candidaturas de los partidos no han contemplado el cupo femenino que observa la legislación argentina, es decir, la obligación de que un tercio de la lista esté compuesto por mujeres.
«La comitiva que se va a votar, en su abrumadora mayoría, son hombres. Es un retroceso desde una mirada de género increíble», señaló.
El próximo 25 de octubre, los argentinos votarán en unos comicios en los que también se renovarán una multiplicidad de cargos que va desde legisladores municipales hasta la sucesión de Cristina Fernández luego de 12 años de kirchnerismo en el poder.