miércoles, 7 de octubre de 2015
Exsoldados argentinos construyen refugio en plaza frente a sede del Gobierno

Buenos Aires, 7 oct (EFE).- Exsoldados argentinos que reclaman ser considerados veteranos de la guerra de Malvinas comenzaron a construir hoy un refugio hecho con cemento y ladrillos en la Plaza de Mayo, frente a la sede del Gobierno, luego de siete años de acampe en ese lugar.
Durante el conflicto bélico de 1982 con el Reino Unido, los exsoldados fueron trasladados a la Patagonia argentina y, aunque nunca llegaron al territorio de Malvinas y a sus aguas circundantes, lugar donde se desarrolló la guerra, insisten en que formaron parte del teatro de operaciones de la contienda.
Es por eso que, desde que terminó la guerra y más activamente desde hace siete años, cuando comenzaron el acampe en la Plaza de Mayo de Buenos Aires, reclaman que se los reconozca como excombatientes y piden percibir los mismos beneficios -en particular las pensiones- que los demás veteranos.
«Los compañeros que murieron durante nuestro rol de cuidado de las bases patagónicas fueron reconocidos como veteranos, así como también los integrantes de la Fuerza Aérea que estaba en esas mismas bases», explicó a Efe Tulio Fraboschi, líder del reclamo.
«Lo que estamos pidiendo no es algo nuevo: es igualdad ante la ley, la misma que pidió el papa Francisco en una de sus homilías cuando dijo que la usurpación no fue solo en las islas, sino también de los títulos y honores de las personas que acampamos en Plaza de Mayo», prosiguió.
Marcos Medina, otro referente del movimiento, dijo a Efe que hicieron el refugio porque en los días de acampe en la plaza sufrieron «demasiadas tormentas, calores, fríos y mucha desolación», por lo que esperan que la construcción sirva a modo de resguardo.
Asimismo, Fraboschi explicitó que buscan especialmente la atención de los legisladores, de los gobernantes y de los candidatos a presidente de la próxima elección, y que se está construyendo «en respuesta a los siete años de silencio» de todos ellos.
«Es un refugio que el gobierno no nos dio, porque no nos dieron ni siquiera las gracias», expresó.
La construcción hizo sonar las alarmas de las autoridades del gobierno capitalino y del nacional, ya que se está edificando sin permiso sobre espacio público de la ciudad de Buenos Aires.
Según informaron medios locales, la fiscal Claudia Barcia ordenó el cese de la obra en horas del mediodía, aunque los excombatientes siguieron con su empresa unas horas después.
Medina aseguró a Efe que no le tiene miedo a un desalojo porque solo son «personas que están reclamando su derecho».
«Hace 33 años que no tenemos identidad: queremos que se reconozcan las funciones que cumplimos en ese momento», concluyó el exsoldado.
La guerra de Malvinas, que finalizó con la derrota de Argentina, se desarrolló entre abril y junio de 1982 y dejó un saldo de casi 900 muertos.