jueves, 9 de julio de 2015
Fernández dice que su Gobierno dio autonomía a Argentina en Día Independencia

Buenos Aires, 9 jul (EFE).- La presidenta argentina, Cristina Fernández, protagonizó hoy las celebraciones del último aniversario de la Independencia que el país vivirá bajo su mandato y afirmó que el kirchnerismo aumentó la «autonomía» del país, en vísperas del inicio de la campaña electoral para las primarias de agosto.
Acompañada por varios ministros, por el aspirante del Frente para la Victoria a sucederla en la Jefatura de Estado este año tras las elecciones presidenciales, Daniel Scioli, y por cargos locales, la mandataria conmemoró el 9 de julio con la tradicional visita a la Casa Histórica de San Miguel de Tucumán (capital de la norteña provincia de Tucumán), donde en 1816 se declaró la Independencia.
A continuación, Fernández encabezó un acto masivo en el Hipódromo de la ciudad, ante miles de militantes, durante el que reivindicó el legado de sus casi ocho años de Gobierno y de los cuatro de su difundo marido, Néstor Kirchner (2003-2007).
«Hoy podemos venir con la cabeza en alto acá a Tucumán en nombre de este proyecto a hablar de independencia en serio (…). Podemos decirles que este proyecto le ha dado independencia al país y ha honrado el legado de los que tanto lucharon», aseguró la mandataria, en su discurso, transmitido por cadena nacional.
Este 199 aniversario es el último para Fernández antes de abandonar el poder -en diciembre próximo, al cumplirse los dos mandatos consecutivos que le permite la Constitución- y coincide con la víspera del arranque de la campaña electoral para las primarias de agosto, que definirán a los aspirantes presidenciales para las generales de octubre.
«Ahora ustedes están empoderados así que los que no tienen que tener miedo son ustedes», interpeló la mandataria, quien recalcó que los políticos que lleguen a continuación «deberán mirarlos (a los argentinos) a los ojos por todo lo que todavía falta por hacer en este país».
«Yo confío que los hombres y mujeres que forman parte de este espacio lo harán. Nadie quiere escaparle al juicio de la historia», subrayó.
Fernández habló también de la crisis en Grecia y aseguró que es un «espejo» para Argentina porque a los ciudadanos del país europeo también «les metían miedo» para evitar que «dijeran ‘no’ a las condiciones humillantes de subordinación que les querían imponer desde fuera».
En ese sentido, la presidenta argentina defendió las políticas de inclusión y la decisión de su Gobierno de no acatar el fallo judicial estadounidense favorable a los fondos especulativos que no aceptan la reestructuración de la deuda pública externa y alertó sobre los «buitres» que «revolotean» sobre Grecia y Puerto Rico.
«Esto es construir independencia porque les aseguro que este siglo XXI se va a debatir fundamentalmente en la recuperación de la soberanía de los pueblos (…). Va a haber muchos intentos en la región de volver a políticas neoliberales en donde el Estado desaparezca para permitir que otros hagan sus negocios», agregó.
Sin embargo, también apuntó que en su modelo de país también hay lugar para los empresarios, ya que «no hay inclusión selectiva, no se incluye solo a los pobres. Son los gobiernos neoliberales los que tiran limosnas».
El acto también fue de despedida para el gobernador tucumano, el oficialista José Alperovich, que concluye su mandato en 2015.
Por contra, el revuelo de la jornada lo protagonizó el obispo de Tucumán, Alfredo Zecca, quien durante el Tedeum celebrado antes de la llegada de la presidenta a la provincia se preguntó «de qué pluralismo y democracia se habla» en Argentina si «se convierte automáticamente en enemigo al que con todo derecho discrepa», además de criticar duramente el aborto y la fertilización asistida.
El año pasado las celebraciones de la Independencia estuvieron marcadas por la polémica ya que fue el vicepresidente, Amado Boudou -procesado en dos causas judiciales por corrupción y falsificación de documentos-, el encargado de liderar los actos en ausencia de Fernández, convaleciente por una faringitis, pese a las duras críticas de la oposición y la opinión pública.