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Nerea González
Buenos Aires, 5 ago (EFE).- Papeletas de más de un metro y listas interminables en las que figuran personajes variopintos, incluidos espías, son algunas de las curiosidades de las primarias que se celebrarán el domingo en Argentina.
Unos 32 millones de argentinos están convocados a votar en estas elecciones, en las que se definirán los aspirantes a la Casa Rosada y miles de cargos menores, y que en la práctica constituyen un ensayo de las generales del próximo octubre.
Más de un votante se verá en problemas para introducir su papeleta en las urnas, especialmente en la provincia de Catamarca (noroeste), donde las boletas miden 1,2 metros por la cantidad de candidatos que compiten.
En la provincia de Buenos Aires, principal distrito electoral del país, con un tercio del total del padrón, que este domingo elige también en primarias a los candidatos al gobierno local, las papeletas miden en torno a 80 centímetros.
Los bonaerenses tendrán que decidir entre una cifra récord de 29.658 precandidatos inscritos para competir por cargos municipales, provinciales y nacionales.
En las listas electorales, políticos, deportistas, periodistas, y hasta exvedettes e incluso espías.
Del mundo del deporte proceden los dos grandes protagonistas de la jornada, los aspirantes a la Presidencia con mayores posibilidades, según las encuestas: el oficialista Daniel Scioli y el conservador Mauricio Macri.
Scioli, actual gobernador de Buenos Aires, es conocido como «el Pichichi» entre sus compañeros del Villa La Ñata Sporting Club, su equipo de fútbol sala profesional, deporte en el que se volcó tras abandonar su carrera como motonauta, que le hizo famoso y le costó más de un disgusto, como el grave accidente que sufrió con un lancha en 1989 en el que perdió su brazo derecho.
Macri, también aficionado al fútbol, se hizo popular como presidente de Boca Juniors antes de involucrarse abiertamente en política y conseguir la alcaldía de Buenos Aires al frente de la conservadora Propuesta Republicana (Pro).
El más conocido por su carrera deportiva es el expiloto Carlos Reutemann, quien cambió el asiento de su fórmula 1 por el sillón político hace dos décadas y aspira ahora a renovar su banca en el Senado como aliado de Macri.
La fiebre política ha alcanzado también a la exboxeadora Marcela «La Tigresa» Acuña, el extenista Agustín Calleri y los exfutbolistas Carlos Mac Allister, Sebastián Neuspiller, y Carlos «Chino» Tapia, entre otros.
El exboxeador Martín Coggi, hijo del campeón mundial Juan Martín «Látigo» Coggi, y el exentrenador de Las Leonas y actual técnico del seleccionado masculino de hockey, Carlos «Chapa» Retegui, buscan una concejalía.
Del espectáculo y los medios de comunicación salen nombres como los de la exvedette Zulma Faiad, el empresario mediático Sergio Szpolski y los periodistas Fernando Niembro y Hernán Brienza.
Por un motivo muy diferente han ocupado titulares Luis Rodolfo Tailhade y Marcelo Kaspar, señalados por medios locales como miembros de los servicios de inteligencia, que aspiran a cargos legislativos en las listas kirchneristas.
Los extravagantes anuncios de campaña de los partidos son dignos también de figurar en la lista de curiosidades de la convocatoria.
Macri, que ha evitado los actos masivos y ha centrado su estrategia en encuentros con simpatizantes y sus familias, ha recibido más de una crítica del oficialismo por el estribillo de su tema de campaña: «Tengo dos manos para abrazarte», lo que se ha leído como una referencia directa a Scioli.
El partido Nueva Izquierda lanzó un clip televisivo ambientado en una sala de partos en la que un falso Carlos Menem -presidente entre 1989 y 1999- da a luz a sus «hijos» Scioli y Macri.
Curiosa también es la promoción en la red de Mauricio Yattah, aspirante presidencial del Partido Popular -un bloque justicialista- que ha optado por un perfil «didáctico», con vídeos autograbados con una webcam en los que explica sus propuestas en «power point».