martes, 27 de octubre de 2015
Abogan por reformular líneas de colaboración frente al crimen internacional

Granada (España), 27 oct (EFE).- Expertos en la lucha contra los secuestros con extorsión de cuerpos de seguridad de trece países iberoamericanos y de España abogaron hoy por reformular las líneas de cooperación e incrementar las operaciones conjuntas para combatir un crimen organizado y globalizado que carece de fronteras.
La Guardia Civil española investiga una media máxima de veinte secuestros con extorsión al año en el país y un alto porcentaje está relacionados con otros delitos, especialmente con el tráfico de drogas.
Estas cifras se alejan mucho del número de delitos que combaten los cuerpos de seguridad de países como Bolivia, México o Venezuela, que participan desde hoy en Granada (sur) en un encuentro para compartir líneas de actuación e incrementar la colaboración internacional en la lucha contra este tipo de delitos.
La segunda edición de estas jornadas servirá para que agentes y fiscales especializados en secuestros compartan técnicas de negociación y debatan sobre los peligros actuales en un escenario global después de que el primer encuentro, que se celebró en Málaga (sur de España) en 2011, permitiera crear la Red Iberoamericana Anti-Secuestro (Rias).
El presidente del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), Lorenzo del Río, ha recalcado que la nueva criminalidad, «global y organizada» hace necesario reformular las líneas de cooperación internacional frente a nuevos métodos delictivos.
Del Río subrayó que «ahora los delitos no se agotan en la frontera», por lo que jornadas para la puesta en común de nuevas fórmulas delictivas como las que se celebran en Granada resultan esenciales para garantizar la seguridad.
La efectividad de esta colaboración se comprobó con la actuación conjunta entre la Guardia Civil y la policía de Bolivia, que permitió el año pasado rescatar a una niña de nueve años tras siete meses de secuestro en la selva boliviana de Chapare.
El capitán Grebi Vega, de la fuerza especial de lucha contra el crimen de Bolivia, y el oficial español José Miguel Hidalgo recordaron que la menor volvió a casa por la colaboración internacional y gracias a la alerta de tres participantes del encuentro celebrado en 2011.