La Paz, 23 dic (EFE).- Más de ochenta mil personas se beneficiaron de una amnistía fiscal para multas e intereses sobre deudas tributarias en el municipio de La Paz, medida bautizada popularmente como «perdonazo», informó hoy la Alcaldía de la sede del Gobierno boliviano.
El director de la Administración Tributaria de la ciudad, Ronald Cortez, dijo a Efe que gracias al «perdonazo», que permite pagar deudas anteriores al 2012 sin multas ni intereses, el Ayuntamiento recaudará alrededor de 65 millones de dólares, de los que 28,9 ya fueron cobrados y el resto será pagado en plazos.
La medida extraordinaria concluyó este miércoles, tras casi tres años y medio de vigencia, en los que se recaudó la suma citada, que representa el 70 % de la recaudación impositiva municipal anual (92,5 millones de dólares) y el 25 % del presupuesto para 2016.
La hacienda cobra tributos por propiedades inmobiliarias, automóviles o permisos de actividad económica, entre otros.
El municipio anunció que todas las personas que hubiesen registrado el inicio de su trámite hasta la víspera tendrán noventa días para completar todos los procedimientos para acogerse al plan.
Más del 10 % de los habitantes de La Paz, que cuenta con cerca de 800.000, se acogieron a la medida a lo largo del período y los más rezagados tuvieron que hacer colas el martes durante horas.
Entre los deudores, estaban la profesora de matemáticas Janette Báñez que pagaba tributos por un terreno pero ahora debe hacerlo por tener una casa y Andrea Maita, que debe tributos porque la calle de su vivienda figuraba como si fuera de tierra, pero esta empedrada, según contaron a Efe.
El responsable de los tributos paceños, Cortez, explicó que existen todos esos casos porque el catastro boliviano sólo llega al 40 % de las viviendas de La Paz y la administración «depende de la declaración jurada del contribuyente», ya que no tiene los medios para inspeccionar las 250.000 viviendas que hay en la ciudad.
Tras cinco prórrogas -la medida inicialmente estaba prevista en 2012 para sólo seis meses-, el «perdonazo» se acabó y quienes no se hayan acogido se enfrentarán a sanciones que van desde la retención de cuentas bancarias hasta el embargo preventivo de bienes o la enajenación definitiva, según el funcionario municipal.