EL VIDEO
Discurso de Gabriel Boric
La Paz, 13 jul (EFE).- El ministro boliviano de Gobierno (Interior), Carlos Romero, afirmó hoy que el canciller chileno, Heraldo Muñoz, podría competir en un «campeonato mundial de la mentira» junto con un dirigente de la región andina de Potosí (suroeste) que lidera protestas contra el Gobierno de Evo Morales.
En una rueda de prensa, Romero acusó al presidente del Comité Cívico Potosinista (Comcipo), Jhonny Llally, de tener una «postura enfermiza de mentir y mentir» para evitar dialogar con el Ejecutivo sobre las demandas regionales por las que instituciones civiles potosinas están movilizados desde la semana pasada.
«A estas alturas a mí me quedan dudas si en un campeonato mundial de la mentira, si será el canciller (chileno) Heraldo Muñoz, o el señor Llally el que miente más. Sería una competencia difícil de resolver, seguramente», sostuvo Romero.
El ministro boliviano pareció aludir así a los comentarios que hizo Muñoz en los últimos días sobre los dichos del papa Francisco en su visita a Bolivia respecto de la demanda marítima boliviana.
En una de sus intervenciones en Bolivia, Francisco emplazó a usar un diálogo «franco y abierto» para «evitar conflictos con los países hermanos» y mencionó la reclamación boliviana de salida al mar a Chile.
El pontífice afirmó hoy que «no es injusto» que Bolivia se plantee la salida al mar y que una mediación papal sería un «último paso», durante la rueda de prensa en que compareció de regreso de su viaje a Latinoamérica.
Al respecto, Muñoz afirmó hoy que su país no se siente «presionado» por las declaraciones del papa porque, según dijo, Francisco «ha subrayado que el Vaticano no se puede inmiscuir, no puede aparecer presionando. Esas palabras nos parecen muy sabias».
«Más allá de lo que él menciona, un anhelo, aquí lo que importa para nuestro país es el derecho internacional, el respeto por los tratados, el respeto a lo pactado», agregó
Bolivia perdió su acceso soberano al océano Pacífico en una guerra librada contra Chile a fines del siglo XIX.
El Gobierno boliviano demandó en 2013 a Chile ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya (CIJ) y pidió un fallo que obligue a Santiago a negociar de buena fe su reclamación marítima, tras más de cien años de conversaciones sin resultados.
El Ejecutivo chileno rechaza la demanda de Bolivia con el argumento de que todos los temas limítrofes fueron zanjados en un tratado de paz y amistad de 1925.
Chile también ha objetado la competencia del tribunal de Naciones Unidas para tratar el caso.