jueves, 12 de noviembre de 2015
Bill Clinton dice que «el navío de Brasil no se está hundiendo»

Brasilia, 12 nov (EFE).- El expresidente estadounidense Bill Clinton le pidió hoy a los empresarios brasileños tener confianza en el futuro de Brasil pese a las actuales dificultades económicas y políticas y que se concentren en las «fuerzas positivas» en los momentos de crisis.
«El navío de Brasil no se está hundiendo y el futuro será formidable», aseguró el exmandatario de Estados Unidos (1993-2001) en una conferencia con la que, en un tono optimista, clausuró un seminario organizado por la Confederación Nacional de la Industria (CNI) que reunió a cerca de 2.000 empresarios en Brasilia.
Clinton admitió que Brasil atraviesa dificultades pero instó a los miembros de la patronal de la industria a analizar con más tranquilidad los desafíos del país.
«Los desafíos políticos son una oportunidad para que, de aquí a unos cinco años, ustedes miren hacia atrás y piensen: ¿con qué era que estábamos preocupados?», afirmó el exjefe de Estado, que desembarcó este jueves en Brasilia tras la reunión que tuvo el miércoles en Lima con el presidente peruano, Ollanta Humala.
Además de una grave crisis política, con la presidenta Dilma Rousseff amenazada con sufrir un juicio político de destitución y niveles mínimos de popularidad, Brasil enfrenta una aguda recesión y pronunciadas dificultades económicas.
Los economistas prevén que, tras haber crecido tan solo un 0,1 % el año pasado, el Producto Interior Bruto (PIB) de Brasil sufrirá una contracción del 3,10 % en 2015 y del 1,90 % en 2016.
Igualmente prevén que Brasil cerrará este año con una inflación del 9,99 %, la mayor en trece años, con las tasas de intereses en sus mayores niveles en una década y con un déficit récord en las cuentas públicas.
Clinton, sin embargo, destacó que el gigante latinoamericano no sufre conflictos religiosos ni guerras y mencionó las enormes riquezas naturales del país y su capacidad para producir alimentos y energías renovables.
También recordó los importantes avances sociales alcanzados por Brasil en los últimos 25 años, especialmente en la lucha contra la pobreza, la inclusión social, la diversificación de la economía y la reducción de la deforestación amazónica.
«Su pueblo, sus recursos y su histórico de obtener avances, no solo económicos sino también sociales, les permitirán atravesar este momento difícil», afirmó.
«Ustedes tienen más activos que la mayoría de países del mundo. Prefería estar en la posición de Brasil que en la de muchos otros países», agregó Clinton.
En su opinión, Brasil es uno de los países mejor posicionados en el mundo para desarrollarse a largo plazo.
«No existe cómo lograr todo eso (avances) sin distorsiones ni imperfecciones. Enormes oportunidades fueron creadas. No podemos controlarlo todo, pero podemos controlar la forma como lidiamos con eso», aseguró.
El expresidente estadounidense dijo que el mejor libro sobre política que ha leído en los últimos años fue escrito por un microbiólogo que habla sobre la forma en que los hombres, así como los insectos, consiguen avanzar mediante la cooperación.
«El mundo pertenece a quienes cooperan», dijo al hacer referencia a «La conquista social de la tierra», de Edward O. Wilson.
Agregó que la nación suramericana no marcha aislada en el mundo y que, dado el elevado grado de interdependencia entre los países, su recuperación y éxito interesa a todo el mundo, especialmente a los Estados Unidos.
«El mundo necesita de un Brasil exitoso. Estados Unidos necesita desesperadamente de su mayor socio en el continente para construir una América con democracias que funcionen para combatir el fundamentalismo en otras partes del mundo», dijo.
En cuanto a los grandes desafíos mundiales, Clinton citó los niveles desiguales de crecimiento, los cambios climáticos y el surgimiento de grupos como el Estado Islámico, que definió como la «más exitosa ONG negativa».
En su análisis de la política global, el expresidente mencionó una división de fuerzas «positivas» y «negativas» que operan en diferentes países.
Como fuerzas positivas citó los que luchan por el fortalecimiento de las democracias con propuestas de crecimiento económico, que tienen como antagonistas a los fundamentalistas, como el Estado Islámico, que combaten por instaurar regímenes totalitarios.