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Discurso de Gabriel Boric
Asunción, 5 ago (EFE).- El canciller paraguayo, Eladio Loizaga, elogió hoy la investigación emprendida por Brasil tras la protesta emitida por Paraguay, que denunció que lanchas militares brasileñas penetraron dos veces en territorio nacional la pasada semana.
De acuerdo con la Armada paraguaya, la primera de la incursiones se produjo en Puerto Tigre y la segunda en Puerto Adela, en el departamento de Canindeyú (noreste), ambos en la parte paraguaya del lago Itaipú, y en una de ellas hubo intercambio de fuego.
La Cancillería paraguaya envió una nota lamentando esos incidentes a Brasil, que el domingo se comprometió a abrir una investigación, lo que a comienzos de esta semana fue comunicado oficialmente al Gobierno paraguayo.
«Es importante la respuesta que hemos recibido el lunes de esta semana, donde demuestra la preocupación del Gobierno del Brasil por esta situación, teniendo en cuenta que casi 24 horas transcurrieron y ya hemos obtenido esa respuesta», dijo Loizaga a través de un comunicado de Cancillería.
El canciller añadió que el Gobierno de Paraguay valora positivamente esa comunicación por parte brasileña y pronosticó que en breve va a dar «por cerrado el caso».
Loizaga hizo esas declaraciones tras comparecer ante la Cámara de Diputados, donde dio a conocer todas las informaciones relativas al incidente junto al ministro de Defensa, Bernardino Soto Estigarribia.
El titular de Defensa ratificó que se trató de una violación de la soberanía paraguaya, en base a los informes de los efectivos de la Armada Nacional desplegados en Puerto Tigre y en Puerto Adela.
«El ingreso se produjo en aguas territoriales paraguayas, por eso se puede decir que es una transgresión a las normas internacionales y una violación a la soberanía nacional», declaró Estigarribia.
Según los medios paraguayos, los militares brasileños desarrollaban un acción contra bandas dedicadas al contrabando en esa zona
El pasado lunes, el presidente de la delegación de Paraguay en el Parlamento del Mercosur (Parlasur), Alfonso González, exigió a Brasil una «inmediata reparación compensatoria» y que admita su culpabilidad.