Bogotá, 4 dic (EFE).- Una operación combinada de fuerzas militares colombianas y brasileñas permitió la captura de 24 personas que se dedicaban a la minería ilegal, especialmente la explotación de oro, en el departamento del Guainía (sureste de Colombia), informó hoy el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas.
La operación, denominada «Anostomus II», se desarrolló en los caseríos de Morichal y Puerto Colombia, donde se desarticularon cuatro puntos de extracción minera ilegal.
Las personas detenidas aceptaron cargos por minería ilegal, así como los delitos de recursos naturales dañados, contaminación ambiental e invasión de áreas de especial importancia medioambiental, manifestó el ministro a periodistas.
Villegas dijo además que los militares destruyeron 18 minas no autorizadas y 12 dragas, y además encontraron seis puntos de explotación a cielo abierto con toda la infraestructura necesaria para la minería.
«Las cifras que se han intervenido por este operativo son muy importantes, con las dragas y los seis frentes a cielo abierto esta explotación minera producía 72 kilos y medio de oro por mes a través de las dragas», dijo el ministro.
Agregó que de las explotaciones a cielo abierto se extraía al mes una media de 10,5 kilos.
«Es decir un total de 82 kilos y medio de oro por mes, que suman más o menos 7.000 millones de pesos (unos 2,3 millones de dólares)», agregó Villegas.
El ministro aseguró también que fue incautada una gran cantidad de mercurio «lo que representa un grave peligro de contaminación y de envenenamiento para las personas y para la fauna», dijo.
Villegas afirmó además que con esta operación se busca salvaguardar la Reserva Natural Puinawai, una de las 56 áreas protegidas del Sistema de Parques Nacionales Naturales y tres de los más importantes resguardos indígenas del Guainía de las etnias Puinaves y Curripacos.
Agregó que se ha hecho un trabajo de acercamiento con las comunidades nativas «para que entiendan que no es un operativo contra ellas, es más en su favor para evitar la contaminación y la destrucción del medioambiente, y poder propiciar así que las reservas naturales de Colombia se preserven».