Río de Janeiro, 31 ago (EFE).- La fábrica que la automotriz Volkswagen tiene en el municipio brasileño de Tabuaté volvió hoy a «operar con normalidad», tras doce días de huelga, gracias al acuerdo alcanzado entre la compañía y los trabajadores, confirmaron a Efe fuentes de la compañía.
«Empresa y sindicato llegaron a un acuerdo equilibrado que posibilitará la adecuación necesaria de la estructura de costes y la eficiencia de la unidad», señaló la automotriz alemana en un comunicado.
El acuerdo alcanzado por ambas partes contempla la apertura de un proceso de bajas voluntarias, válida hasta el 11 de septiembre, así como la adopción de un programa de prejubilaciones.
Además, la empresa automotriz se ha comprometido a readmitir a los 43 empleados, cuyo despido, el pasado 17 de agosto, supuso el inicio de las protestas en la fábrica, informó el Sindicato de Metalúrgicos de Tabuaté en su perfil de Facebook.
Este acuerdo permitirá a Volkswagen no solo retomar su actividad en la planta de Tabuaté, municipio en el estado de Sao Paulo, sino que además facilitará un posible ajuste de plantilla en la fábrica, ante la necesidad que tiene la compañía de prescindir de unos 500 puestos de trabajo en sus instalaciones paulistas.
Protegido durante años con incentivos del Gobierno, el sector del automóvil enfrenta este año una grave crisis por la suspensión de los descuentos fiscales que el Estado le concedía, así como por el empeoramiento de una economía brasileña, en recesión técnica, lastrada por una inflación al alza, un aumento de las tasas de interés y la restricción del crédito.
Con el fin de disminuir la producción y adecuarla a la actual demanda, numerosos fabricantes del sector automovilístico en Brasil han reducido sus plantillas en los últimos meses mediante procesos de despido colectivo o la concesión de vacaciones colectivas a sus trabajadores.
De acuerdo con la empresa alemana, el acuerdo alcanzado en Tabuaté «fortalece las bases de un futuro sostenible».