Santiago de Chile, 5 ago (EFE).- El Gobierno chileno afirmó hoy que el crecimiento del 2,7 % interanual que anotó el pasado junio la actividad económica no le deja satisfecho del todo, pese a admitir que se trata de una cifra «buena».
«Es un número bueno en el contexto de lo que estábamos viviendo en los últimos meses, pero sin duda todavía no nos deja plenamente satisfechos», afirmó el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés.
«Queda trabajo de todos para asegurar un mayor crecimiento», subrayó a los periodistas el responsable de las finanzas públicas chilenas.
El 2,7 % de crecimiento en junio, informado hoy por el Banco Central, se situó por encima de los pronósticos del mercado y los expertos, que fluctuaban entre un 2,0 y un 2,5 %.
La cifra corresponde al Índice Mensual de Actividad Económica (Imacec), que incluye un 91 % de los bienes y servicios del producto interior bruto y, con ella, la actividad se incrementó en Chile un 1,7 % interanual en el segundo trimestre de este año y creció a un ritmo del 2,1 % en el primer semestre de 2015.
Tras participar en un acto oficial en el palacio de La Moneda, el ministro Valdés precisó que el dato de junio, «nos deja contentos con respecto a que la economía muestra capacidad de poder crecer más de lo que lo estaba haciendo, pero el crecimiento es una tarea que tenemos que construir entre todos y todos los días».
«El crecimiento no está garantizado, tenemos que trabajar todos por ese crecimiento y eso incluye, por ejemplo, tener una reforma laboral equilibrada», añadió, en alusión a un proyecto que se debate en el Parlamento que refuerza la capacidad de negociación de los sindicatos y amplía el derecho a huelga.
El proyecto topa con un rechazo frontal de los empresarios, que quieren mantener los reemplazos de trabajadores en casos de huelga, y de la oposición derechista, que señala que solo fortalece a las cúpulas sindicales y debilita a los trabajadores no sindicalizados.
La economía chilena vive una recuperación más lenta que la esperada tras un ciclo de desaceleración que la llevó a crecer solo un 1,9 % en 2014, la cifra más baja en los últimos cinco años, debido a las bajas expectativas existentes, que ha incidido en bajas cifras de inversión y consumo privados.
En ese contexto, el Banco Central anunció que podría revisar nuevamente a la baja su previsión de crecimiento el próximo septiembre, tras haberla recortado en junio en un cuarto de punto, hasta un rango de entre un 2,25 y un 3,25 %, mientras en julio el Gobierno recorto su propio pronóstico, desde un 3,6 a un 2,5 %.
El Banco Central dará a conocer la variación del PIB del segundo trimestre el próximo 18 de agosto.