(Actualiza el número de muertes)
Brasilia, 20 jul (EFE).- Las autoridades de la ciudad brasileña de Manaus, enclavada en el corazón de la Amazonía, investigan una ola de violencia desatada la noche del pasado viernes, desde cuando se han registrado 38 homicidios, según un balance difundido hoy.
La Secretaría de Seguridad Pública de la ciudad informó de que se sospecha que la mayoría de esos crímenes pueden estar vinculados y ser parte de «ajustes de cuentas» entre bandas de delincuentes dedicadas al tráfico de drogas y otras actividades ilegales.
El último reporte policial indicó que cinco personas murieron el viernes, veinte el sábado y trece entre el domingo y la madrugada de este lunes, incluido uno de los dos vigilantes del Instituto Nacional de Investigaciones de la Amazonía (INPA, por su sigla en portugués) atacados a tiros cuando estaban en horario de servicio.
Los 38 homicidios que se investigan fueron cometidos entre la noche del viernes y la madrugada de hoy, y en su mayoría ocurrieron en zonas periféricas de la ciudad, en las que actúan las bandas que pudieran ser responsables por esa ola de violencia.
Según el titular de la Secretaría de Seguridad, Sergio Fontes, las autoridades han reforzado la presencia policial en las calles y han iniciado investigaciones para identificar a los responsables.
«Tenemos que dar una respuesta para todas estas muertes», declaró Fortes a medios locales, ante los que reconoció que las sospechas de que la ola de violencia responde a disputas entre bandas rivales son «fuertes».
Según el funcionario, existen bandas delictivas formadas dentro de las cárceles, que, pese a que sus integrantes están presos, controlan el tráfico de drogas en la ciudad.
«Si tenemos una disputa interna dentro de los presidios, es muy posible que eso se haya trasladado a las calles», declaró.