jueves, 14 de agosto de 2014
Elecciones en Brasil tras la muerte de Campos, volver a empezar
La ecologista Marina Silva duda si heredar la candidatura de  Campos en las elecciones. Foto. F. BIZERRA (efe)

La ecologista Marina Silva duda si heredar la candidatura de Campos en las elecciones. Foto. F. BIZERRA (efe)

Por P. GIULIANO/I. PERALESEfe/SAH

La muerte, ese elemento que se coló de forma trágica en la campaña de Brasil, obliga a barajar y dar de nuevo en las estrategias de todos los partidos. El accidente que le costó la vida al socialista Eduardo Campos obliga a reajustar posiciones y relanzar sus respectivas campañas de cara a las elecciones del 5 de octubre. El nuevo escenario tiene a Marina Silva  en el centro de las preocupaciones. La preocupación radica en si ella decide, como algunos analistas anticipan, tomar el testigo de su compañero fallecido y ocupar la cabeza de lista de los socialistas.
Marina enfrenta resistencias dentro del Partido Socialista Brasileño (PSB) que lideraba el exgobernador de Pernambuco. «De lo que debemos tener claridad actualmente es que la campaña volverá a comenzar de cero», comenta el historiador Francisco Carlos Teixeira, de la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ).

La presidenta de Brasil puede pensar que, ahora, Marina le puede complicar lmás la reelección

La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff,  puede pensar que, ahora, Marina le puede complicar más la reelección

La ecologista Silva, exministra de Medio Ambiente del Gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva, se afilió al PSB de Campos el año pasado, cuando naufragó el registro como partido de su Red Sustentabilidad y fue colocada en la fórmula, tras su tercer lugar en los comicios de 2010, donde obtuvo casi 20 millones de votos y el 20 % de apoyo.
Según Teixeira, el PSB enfrenta divisiones internas frente al escenario nacional.
Un sector está a favor de volver a formar parte de la coalición oficialista de Dilma Rousseff, del Partido de los Trabajadores (PT), y otra está alineada al opositor Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), del candidato Aecio Neves, en los estados de Pernambuco, Sao Paulo y Minas Gerais.
«La opinión pública puede obligar al PSB a aceptar a Marina Silva como candidata, porque tiene posibilidades de causar un terremoto en la elección», evaluó.

Aecio Neves aguarda la decisión de Marina para actuar

Aecio Neves aguarda la decisión de Marina para actuar

En ese sentido, el politólogo trazó dos escenarios: para el PT de Rousseff, la favorita a la reelección, el impacto sería que Silva pueda llevar la disputa electoral a un escenario de segunda vuelta, pero para el PSDB sería peor, porque ella está en condiciones de superar a Neves y ser la nueva fuerza nacional.
«Una candidatura de Marina podría causar una tragedia total para el PSDB, que pasaría a ser un partido menor» luego de haber gobernado el país con Fernando Henrique Cardoso entre 1995 y 2002, según Teixeira.
En ese sentido, halló similitudes en el «liberalismo económico» de Silva y de Neves y recordó que la ambientalista apunta a la disminución del rol del Estado en los grandes proyectos nacionales.
El historiador pronosticó que podrá duplicarse el actual 9 % que tenía la candidatura de Campos en las encuestas en caso de que la aspirante sea Silva.
Teniendo en cuenta que Silva aún no definió si asumirá la candidatura, el analista político Claudio Couto, de la universidad Fundación Getulio Vargas (FGV) de Sao Paulo, comenta que en un primer momento los votantes del fallecido Campos han migrado hacia Rousseff y Neves.
«Si (Silva) no sustituye a Campos en el PSB, Rousseff y Neves ganan más», dijo Couto, quien también prevé conflictos entre las alas ideológicas adversas dentro del partido que conducía el fallecido dirigente.
La prensa comenzó a lanzar nombres que podrían ser compañeros de fórmula de Silva, como el exfutbolista Romario, la exalcaldesa de Sao Paulo Luiza Erundina -ambos del PSB- o el excomunista Roberto Freire, del aliado Partido por el Socialismo (PPS).
«Roberto Freire es parte de la coalición armada por Campos y deberá ser escuchado, pero no tiene consensos para intentar ganar nuevos votos. Romario no sería bueno porque está posicionado en forma excelente para ser senador por Río de Janeiro», apunto Couto.
El politólogo arriesgó que «no sería una sorpresa» si se agrega a una candidatura de Silva el nombre como su aspirante a vicepresidenta de Erundina, una veterana política paulista con un perfil más de izquierda.
«Pero tampoco me sorprendería que el PSB imponga a un nombre con menos perfil pero perteneciente al ‘establishment’ partidario», de acuerdo a la visión de Couto.

De momento, el final está abierto. El de los socialistas y el de las elecciones.