Por Ignacio PERALES, para SudAmericaHoy (SAH)

Brasil sigue siendo el destino de grandes inversiones. El gigante sudamericano genera confianza dentro y fuera de sus fronteras. En estos tiempos, donde sopla el viento económico a su favor, el sector de hidrocarburos gana terreno. El presidente de Repsol Sinopec, José María Moreno, afirmó que la compañía hispano-china garantiza su plan anual de inversiones en Brasil, con promedio de 1.000 millones de dólares para 2013, a pesar del incremento de los costes para la explotación de hidrocarburos.
El diario Valor Económico de Sao Paulo, difundió unas declaraciones suyas donde indicó que las inversiones aumentarán el próximo año para el desarrollo de la explotación del campo petrolífero de Sapinhoa, operado por la estatal brasileña Petrobras en el presal, un enorme campo de reservas de hidrocarburos en aguas profundas.
Repsol Sinopec está pendiente -posiblemente hoy sea el día- de la autorización del estatal Instituto Brasileño del Medio Ambiente (Ibama) para la explotación de un segundo pozo en las reservas de Seat, las mayores de la cuenca de Campos, en el litoral sudeste del país.
La perforación -informa Efe- está previsto que se realice por medio de la sonda surcoreana Ocean Rig Mylos, con una tecnología que elevó los costos de 800.000 a 830.000 dólares por día.
Moreno consideró que si los volúmenes se confirman, en una fase de evaluación que termina en 2016, la primera extracción de gas deberá comenzar en 2021.
Sobre la decisión de la compañía de retirarse de la subasta del campo de Libra, el mayor del país que fue subastado hace unas semanas, Moreno explicó que Repsol Sinopec buscó socios para integrar un consorcio, pero ninguna empresa quería una participación superior al 10 % y «así no alcanzamos el número necesario»,.
Las petroleras asiáticas China National Corporation (CNPC) y China National Offshore Oil Corporation (CNOOC), la francesa Total, la anglo-holandesa Shell y la estatal Petrobas, garantizada por ley como operadora, se adjudicaron el 21 de octubre la licitación del campo de Libra, el mayor yacimiento de hidrocarburos hasta ahora descubierto en Brasil.