miércoles, 22 de julio de 2015
Afirman no confundir a FFAA chilenas de hoy con caso cometidas en dictadura

Santiago de Chile, 22 jul (EFE).- El ministro de Defensa de Chile, José Antonio Gómez, dijo hoy que es importante que se conozca la verdad en situaciones tan violentas y duras como el caso de dos jóvenes que fueron quemados por una patrulla militar bajo la dictadura militar aunque advirtió que «no se debe confundir con las Fuerzas Armadas de hoy».
«No se debe confundir a las Fuerzas Armadas de hoy con aquellos que cometieron delitos en el periodo de ruptura institucional, durante la dictadura (1973-1990), son épocas distintas», enfatizó el titular de Defensa.
El ministro de la Corte de Apelaciones de Santiago, Mario Carroza, comenzó hoy a interrogar a cinco de los siete exmilitares involucrados en el caso de Rodrigo Rojas y Carmen Gloria Quintana, a quienes una patrulla militar prendió fuego en 1986 y el primero de ellos murió.
Debido a las contradicciones entre la versión de un exrecluta testigo y los detenidos, el juez Carroza seguirá este jueves con nuevas diligencias e interrogatorios a las que se sumarán los dos detenidos en el sur.
Por el momento, los cinco interrogados quedaron a resguardo en el Batallón de Policía Militar en Peñalolén.
El ministro de Defensa hizo una llamado a distinguir situaciones y tiempos: «Cuando hablamos de gente que ha cometido crímenes estamos hablando de gente que está fuera del Ejército, fuera de las Fuerzas Armadas. Estamos hablando hoy en día de una institucionalidad distinta, no podemos confundir los pactos de silencio con las Instituciones», apostilló.
«Acá hay personas que han cometido delitos graves y que probablemente han mantenido silencio como se ha demostrado ahora, pero no confundamos a las Fuerzas Armadas en esta materia, yo creo que es un gravísimo error», recalcó Gómez.
El ministro de Defensa que tras el golpe militar del 11 de septiembre de 1973 estuvo detenido en la Academia de Guerra de la Fuerza Aérea, la Escuela Militar y el Estadio Nacional, valoró que el exrecluta Fernando Guzmán revelara la verdad, «porque eso va a llevar finalmente a buscar justicia sobre un tema tan difícil».
«Mi experiencia personal, por supuesto que fue dura, pero creo que también tenemos que tener una mirada hacia el futuro. En esa mirada hacia el futuro, en esa construcción de esta sociedad es en la que nosotros queremos colaborar, en que el pasado, sin perjuicio que no se pueda borrar, no sea nunca más parte de las Fuerzas Armadas, este pasado grave, doloroso y muy duro para todos los chilenos», aseveró.
El titular de Defensa recordó que hoy existen las facilidades y medios para que las personas que tienen información respecto a temas de violaciones de derechos humanos puedan revelarla.
«Sería muy importante para las familias, para todos nosotros que esto se pueda dar con mayor precisión, con mayor fuerza y llegar finalmente a la verdad y justicia que es lo que se espera en situaciones como estas», concluyó.
Los exmilitares implicados son Luis Zúñiga, Francisco Vásquez, Sergio Hernández, Julio Castañen, Iván Figueroa, Nelson Medina y Jorge Astengo.
Los hechos ocurrieron el 2 de julio de 1986, durante una protesta popular contra el régimen de Augusto Pinochet (1973-1990), cuando una patrulla militar detuvo en un barrio obrero a Carmen Gloria Quintana, estudiante de psicología, y al fotógrafo Rodrigo Rojas De Negri.
Los soldados rociaron con gasolina a ambos jóvenes, les prendieron fuego, que posteriormente apagaron, los subieron a un vehículo y se dirigieron a las afueras de Santiago para arrojarlos a una zanja en un camino rural.
Pese a la gravedad de sus quemaduras, los jóvenes lograron pedir ayuda y fueron trasladados a un hospital, donde el fotógrafo murió al día siguiente, mientras la muchacha consiguió recuperarse después de un largo tratamiento.
Posteriormente, Carmen Gloria Quintana se sometió durante años a un proceso de recuperación en Canadá, pero su rostro y su cuerpo conservan las huellas de las quemaduras.