Santiago de Chile, 30 dic (EFE).- El gobierno chileno afirmó hoy que las cifras de desempleo informadas este mismo miércoles muestran que la economía chilena se ha ajustado de forma sana frente los choques externos que han golpeado con fuerza la actividad.
El desempleo en Chile se situó en un 6,1 % en el trimestre móvil septiembre-noviembre de este año, 0,2 punto porcentual menos que en el anterior y sin variación interanual, informó hoy el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
La cifra fue mejor que la esperada por el mercado y los analistas, que esperaban un descenso más leve del paro, al 6,2 %.
«Lo que está mostrando (la cifra) es que la economía ha estado haciendo un ajuste sano frente al choque externo que hemos tenido», comentó ante los periodistas el ministro de Hacienda en funciones, Alejandro Micco.
«Las políticas que hemos hecho a nivel macroeconómico, entiéndase la política monetaria y la política fiscal, han jugado un rol para mantener el nivel de empleo de la economía en niveles normales para nuestro país», subrayó.
«Obviamente que esta es una noticia, buena para el país, para que la gente se mantenga confiada en que a pesar de que tenemos una situación externa poco favorable, el mercado interno, la economía ha hecho un ajuste sano para esta situación», añadió.
«Recordemos que la caída del precio del cobre ha sido fuerte», añadió, en alusión al principal producto chileno, cuyo precio promedio cerró este año en 2,49 dólares por libra, un 25,85 % menos que en 2014, cuando promedió 3,11 dólares.
Para Chile, cada centavo de dólar en el precio promedio anual del cobre supone cerca de 40 millones de dólares en impuestos y unos 91 millones en términos de balanza de pagos.
La caída de precios del cobre y de otras exportaciones, como los productos forestales, sumada a un bajo consumo e inversión interna han ralentizado la economía chilena, que cerrará el 2015 con un crecimiento del 2,0 %, según todos los pronósticos.
En ese contexto, el Banco Central recortó su previsión para el próximo año a un rango de entre un 2,0 y un 3,0, con la advertencia de que el 2016 también será un año difícil para la economía del país austral.
Para Alejandro Micco, las cifras futuras de empleo y otras variables dependerán del escenario externo. «La estabilidad dependerá de que no tengamos situaciones más complejas desde China, y aunque hemos recibido señales más alentadoras desde Estados Unidos, hay que estar atentos», indicó.