Santiago de Chile, 8 ene (EFE).- El presidente del comité de gobierno de Unió Democràtica de Catalunya, Josep Antoni Duran i Lleida, prevé que Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) concurra en solitario si nuevamente hay elecciones en esa comunidad autónoma española en marzo próximo y afirmó que las negociaciones actuales son un pretexto para «vestir el desacuerdo».
Duran cree improbable que antes de la fecha límite del próximo lunes haya un acuerdo la coalición Junts pel Sí (Juntos por el Sí) y la anticapitalista Candidatura de Unidad Popular (CUP) para elegir como presidente de la Generalitat (Gobierno autonómico) a Artur Mas.
Ello obligaría a Mas (actual presidente en funciones) a firmar el decreto para convocar nuevamente elecciones en Cataluña, después de que las celebradas en septiembre de 2015 no hayan permitido elegir a un nuevo jefe del Ejecutivo catalán.
Duran cree que la reedición de la coalición electoral independentista Junts pel Sí (integrada por la formación de centro derecha Convergencia Democràtica de Catalunya y la izquierdista Esquerra Republicada de Catalunya) es una decisión que «tendrían que tomar ambos partidos».
No obstante, el líder de Unió Democràtica de Catalunya vaticina que ERC podría presentarse en solitario a los comicios que eventualmente se celebrarían en marzo próximo.
«Más que Convergencia vaya por su lado, quizá la observación sería que ERC vaya por el suyo», dijo a Efe el político catalán, quien hoy participó en Santiago en un encuentro internacional organizado por la Democracia Cristina de Chile y la Fundación Konrad Adenauer.
«Creo que ERC ha ido muy forzada en los últimos tiempos y ya no quiso ir con Convergencia» en las elecciones generales celebradas en España el pasado 20 de diciembre. «Pienso que ahora no va a ir», agregó.
Duran consideró que las intensas jornadas de reuniones que se han llevado a cabo en los últimos días con el fin de llegar a un acuerdo para elegir al presidente de la Generalitat son un pretexto para «vestir un desacuerdo» y «responsabilizar al otro».
«Las palabras y posiciones de unos y de otros estos días en el seno de Junts pel Sí reflejan el intento de ‘cargar el mochuelo’ al otro partido para poder justificar en su día porqué no vuelve a existir Junts pel Sí».
La dificultad para que el Parlamento de Cataluña elija al jefe del Ejecutivo autonómico estriba en el hecho de que el candidato de la coalición Junts pel Sí, Artur Mas, cuenta con 62 escaños y estaba a la espera de recibir el apoyo de la plataforma anticapitalista Candidatura de Unidad Popular, que obtuvo 10 diputados.
Sin embargo, la CUP puso como condición que Mas no fuera el candidato. Ello ha imposibilitado que la situación se desbloqueara y podría forzar unas nuevas elecciones catalanas.
Para Duran i Lleida (que hasta hace unos meses fue socio político de Artur Mas), más que buscar un acuerdo final «se está intentando dotar de argumentos suficientes para afrontar la próxima campaña electoral y acusar al otro de que es el responsable de que no haya gobierno»
Asimismo, el líder de Unió manifestó su preocupación por la situación de Cataluña, que tiene un gobierno en funciones y que probablemente tiene unas elecciones a las puertas, en un contexto económico «ni mucho menos brillante».
Recalcó que las nuevas elecciones en Cataluña y posiblemente la repetición de las recientes elecciones generales en España generan «inestabilidad» y recordó que la economía española «no está precisamente boyante para permitirse el este lujo».
«Me parece una situación muy preocupante desde la perspectiva política pero, sobre todo, de las consecuencias económicas y sociales», sentenció.