Santiago de Chile, 20 nov (EFE).- Álvaro Corbalán Castilla, exjefe operativo de la Central Nacional de Informaciones (CNI), la policía secreta de Augusto Pinochet, fue trasladado hoy a la Cárcel de Alta Seguridad de Santiago tras ser sorprendido por tercera vez en su celda con un celular y un chip.
Corbalán, está sentenciado a una cadena perpetua y a otras penas, tras ser condenado en varios casos de violaciones a los derechos humanos.
La ministra de Justicia de Chile, Javiera Blanco, anunció hoy que el exagente fue trasladado este viernes a la Cárcel de Alta Seguridad tras incumplir el régimen interno del penal de Punta Peuco, a 35 kilómetros de Santiago, donde permanecía recluido hasta el momento.
Muchos de los exagentes de la CNI cumplen sus penas en la prisión de Punta Peuco, al norte de Santiago, que, según diversos testimonios, posee piscina, cancha de tenis, mesas de billar y cuenta además con acceso a televisión por cable, internet y telefonía celular.
No obstante, las autoridades carcelarias han asegurado que no hay lujos y que los condenados no tienen habitaciones individuales, esto último debido a que nuevas sentencias de los tribunales han hecho aumentar la población penal.
La decisión de trasladar a Corbalán a una celda aislada y con vigilancia permanente en una prisión de alta seguridad fue tomada tras el hallazgo de un celular y un chip en la celda, hecho que ya había ocurrido en ocasiones anteriores.
El hallazgo ocurrió en el marco de una operación de allanamientos en 50 penales a nivel nacional, según explicó el director de Gendarmería, Tulio Arce.
Asimismo, se decretó una investigación sumaria en Punta Peuco, y se suspendió temporalmente al alcaide del recinto.