jueves, 16 de julio de 2015
Gobierno chileno dice 30 % personas participan en marchas «son delincuentes»

(Actualiza con excusas del subsecretario del Interior)
Santiago de Chile, 16 jul (EFE).- Un 30 por ciento de las personas que participan en marchas, especialmente en la capital chilena, «son delincuentes», porcentaje que incluso puede ser mayor, aseguró el subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy.
La autoridad gubernamental entregó esta cifra en una exposición realizada ante la Comisión de Seguridad Ciudadana de la Cámara de Diputados sobre los protocolos que utiliza para estos casos la policía, que hoy difunde la página electrónica de Radio Bío Bío.
Aleuy detalló que, para ellos, como definición, en el caso de las marchas, un delincuente es toda persona que atenta contra la propiedad pública y privada; lanza (bombas) molotov y ataca a Carabineros, además de aquellas personas que roban en diversos establecimientos.
El revuelo causado por sus declaraciones, hizo que mediante un comunicado difundido en la tarde del jueves, Aleuy, pidiera excusas a quienes se hayan sentido afectados en su dignidad al decir que «un 30 por ciento de las personas que participan (en las marchas) son delincuentes».
Añadió que «no ha sido mi intención establecer una distancia frente a los actores sociales que justificadamente participan en actos públicos, por el contrario, siempre hemos estado disponibles para buscar los mejores acuerdos para asegurar el uso del espacio público respetando el derecho de todos».
«Si alguna persona o grupo de personas se ha sentido lesionada en su dignidad con mis expresiones pido nuevamente excusas sin reserva alguna», dice parte del texto donde la autoridad aclara que al margen del contratiempo pide «continuar debatiendo sobre las mejores formas para fortalecer la seguridad de todos».
En su exposición, el subsecretario del Interior había puesto como ejemplo la movilización de la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech) que se realizó en mayo pasado y por primera vez en horas de la noche que de cien detenidos, ochenta portaba un objeto robado.
El pasado 28 de mayo, una protesta convocada de noche por la Confech finalizó con varios lesionados, entre ellos nueve carabineros, un total de 172 detenidos, varios locales comerciales saqueados y otros dañados con bombas incendiarias, así como semáforos y otros bienes públicos destruidos.
Al menos media docena de locales comerciales fueron saqueados o sufrieron intentos de saqueo a lo largo de la Alameda Bernardo O’Higgins, la principal avenida de Santiago, mientras los bomberos lograron sofocar varios fuegos iniciados por bombas incendiarias lanzadas contra sucursales bancarias y una iglesia.
Un edificio debió ser evacuado a causa de emanaciones desde un local de equipos telefónicos que fue quemado en la planta baja.
Para el presidente de la Comisión de Seguridad Ciudadana, el diputado democristiano Matías Walker, estos datos nuevos son importantes para tomar mayores medidas en cuanto a inteligencia policial y otros factores.
«Eso nos obliga a tomar acciones que hemos solicitado hace tiempo. Por un lado, mayor inteligencia policial; mayor focalización de las medidas de disuasión en el marco de manifestaciones; y, por supuesto, tomar todas las medidas del caso», añadió el legislador.
En tanto, el diputado de la derechista Unión Demócrata Independiente (UDI), Arturo Squella, afirmó que esas cifras «no dejan de sorprender» y, por ello, estimó vital que la autoridad redoble esfuerzos en las políticas públicas en la materia.