Santiago de Chile, 26 nov (EFE).- El nuevo agente de Chile ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya, José Miguel Insulza, aseguró hoy que si Bolivia retira su demanda marítima podría abrirse un «diálogo directo» entre ambos países.
Insulza, que este jueves se reunió con el presidente del Senado, Patricio Walker, dijo, además, que de retomar las conversaciones con el país vecino, se debe hacer de la manera «más formal posible».
Ayer miércoles, Insulza ya había dejado entrever esta posibilidad, cuando aseveró que cualquier diálogo era incompatible con la controversia en La Haya.
Hoy, el exsecretario de la Organización de Estados Americanos (OEA) fue más explícito, se puede ir a un «diálogo directo».
El pasado 24 de septiembre, la CIJ se declaró competente para dirimir la demanda planteada en 2013 por Bolivia contra Chile para que el tribunal declare la obligación de Santiago de negociar un acceso soberano al océano Pacífico que La Paz perdió en la guerra del Pacífico, a fines del siglo XIX.
Los jueces del alto tribunal de la ONU rechazaron con 14 votos contra dos la objeción preliminar presentada por Chile para que se declarara incompetente.
El agente y Walker, compartieron ideas en la Cancillería sobre lo que será la estrategia del país austral en la denominada «segunda etapa» del juicio con Bolivia, tras el fallo preliminar entregado por la CIJ el pasado septiembre.
En ese sentido, Insulza declaró que «es importante reiterar y demostrar que Chile es un país democrático, abierto y con una gran voluntad latinoamericana, que desea tener buenas relaciones con sus vecinos».
Al mismo tiempo, el llamado ‘Panzer’ de la política chilena destacó que «somos un país que defiende, como muchos países en el mundo, de manera muy celosa su soberanía».
En esta ocasión, el excanciller durante la magistratura del presidente Ricardo Lagos (2000-2006), descartó la idea de realizar una «competencia comunicacional» frente a la que ha llevado el mandatario boliviano Evo Morales, para difundir ante la comunidad internacional la postura chilena.
Además, agrego que el país austral «no está haciendo su política exterior en torno a este tema».
Frente a la cobertura que ha entregado la prensa -nacional y de Bolivia -a la demanda entre ambos países, el agente de la CIJ enfatizó que el tema no se ha «multilateralizado» y sigue siendo un asunto «bilateral».
En la misma línea, añadió que «cuando uno visita países amigos le cuenta cuáles son los problemas bilaterales que tiene y (ello) no quiere decir que los involucre».
El nuevo agente ante la CIJ, que fue nombrado el lunes por la presidenta Michelle Bachelet, declaró a raíz de la renuncia de su antecesor Felipe Bulnes, quien acuso «falta de cohesión» entre los actores nacionales, que no existe ningún tipo de fisura en el equipo negociador.
«No hay ningún tipo de fisura entre nosotros» y tampoco «no hay nada que recuperar en el sentido de la unidad nacional (cohesión) en torno a este tema», enfatizó.