jueves, 19 de noviembre de 2015
ACNUR, «altamente» preocupada por asesinato de tres líderes en Colombia

Bogotá, 18 nov (EFE).- La Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) se declaró hoy «altamente» preocupada por el asesinato de tres líderes sociales en Colombia en momentos en que el Gobierno y las FARC buscan ponerle punto final al conflicto armado que padece el país desde hace más de medio siglo.
Según la ACNUR, «es altamente preocupante» el asesinato de esas personas porque ocurrió «en medio de los importantes esfuerzos que vienen haciendo el Gobierno nacional y la guerrilla de las FARC por acordar el fin del conflicto».
El organismo internacional hizo un llamado a «que sea respetada y protegida la vida de las víctimas y sus representantes, con garantías suficientes para ejercer su liderazgo».
Entre las víctimas se encuentra Luis Hernández, representante de la comunidad afrocolombiana ante la Mesa de Víctimas en Tierralta, en el departamento de Córdoba (norte), quien fue asesinado el pasado 13 de noviembre por desconocidos.
La ACNUR indicó que el homicidio de Hernández coincide con amenazas contra varios miembros de la Mesa de Víctimas de ese municipio desde hace unas semanas.
Ese mismo día pero en la población de Trinidad, en el departamento del Casanare (este), también fue asesinado el defensor de derechos humanos y medioambiente Daniel Abril.
Además, el pasado 10 de noviembre murió a manos de desconocidos Uriel Humberto Amaya, presidente de la Acción Comunal del corregimiento de San Cristóbal, en el departamento de Antioquia (noroeste).
A juicio de la ACNUR, la muerte de Amaya «profundiza los temores de una comunidad que ha estado sometida desde hace años a los efectos de la violencia ejercida por diferentes grupos armados organizados y que ha sido víctima de desplazamiento forzado».
La ACNUR señaló que los efectos de estas muertes «no se cuentan únicamente como la lamentable pérdida de vidas humanas, sino también en el amedrentamiento general sobre los procesos sociales que ellos impulsaban».