Marta Pérez
Fuyeirah (Emiratos Árabes Unidos), 14 sep (EFE).- Tres días después de su llegada al puerto de Fuyeirah, en la costa del golfo de Omán, el buque del Ejército colombiano ARC «7 de agosto» abandona hoy tierras emiratíes para continuar su labor de lucha contra la piratería en el océano Índico.
Después de un mes participando en la Operación Atalanta, el barco colombiano llegó el pasado 11 de septiembre a Fuyeirah, donde fue recibido con aires festivos por la orgullosa comunidad colombiana que vive en el país árabe.
A 22.000 kilómetros de su tierra, los 86 tripulantes del barco, todos militares y entre los que se encuentran tres españoles, fueron recibidos por decenas de compatriotas afincados en EAU.
«Han hecho posible un encuentro de sangre en tierras lejanas y nos han traído un trozo de Colombia, mientras participan en operaciones antipiratería coordinadas internacionalmente», aseguró a Efe Darío Malaver, uno de los colombianos que tuvo la oportunidad de visitar el buque.
El ARC «7 de Agosto» es un patrullero construido totalmente en Colombia que se integró en la Operación Atalanta el pasado 9 de agosto, gracias a la aplicación de un convenio de colaboración entre los Ejércitos español y colombiano.
«Cumplimos el mandato de proveer seguridad a las embarcaciones mercantes en el golfo de Adén y el cuerno de África, y de garantizar las actividades marítimas legales», señaló a Efe el comandante de la patrullera, Darwin Alberto Alonso Torres.
El capitán añadió que su función es la de «proteger a los buques del Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas que ofrecen apoyo y ayuda a todas las poblaciones vulnerables de Somalia, que se han visto afectadas a causa de conflictos internos».
Según el militar colombiano, la operación logró «evitar que los piratas hagan acto de presencia», lo cual supone un éxito.
«Sabemos donde se encuentran sus campamentos principales gracias a que tenemos información de inteligencia naval, fotos de exploración aéreo-marítima, satélites, helicópteros e inteligencia humana, y nos hemos ubicado frente a ellos para decirles: ‘estamos acá, sabemos que ustedes están ahí y aquí nos vamos a quedar'», añadió.
Durante su participación en la Operación Atalantaa, el ARC «7 de Agosto» ha recorrido más de 6.550 millas náuticas desarrollando tareas de vigilancia y ha hecho seguimiento de 237 buques mercantes que transitaron por la zona.
Zarpó de Cartagena, en Colombia, el pasado 27 de junio y ha atracado en cinco puertos de Europa, Asia y África. Hoy, vuelve desde Fuyeirah a su área de operaciones en el Océano Índico para continuar con su misión.
Alonso Torres declaró que «es un orgullo poder demostrar las capacidades que durante numerosos años Colombia ha venido adquiriendo y fortaleciendo en el marco regional del Caribe y el Pacífico para mitigar los efectos de las amenazas que actúan en el mar como el narcotráfico, la piratería y el contrabando».
En esta escala técnica de cuatro días, los militares han llevado a cabo tareas de aprovisionamiento, tanto de combustible como de víveres, y han tenido la oportunidad de descansar después de muchos días en el mar.
La tripulación, horas después de atracar en Fuyeirah, recibió al embajador de Colombia en EAU, Faihan al Fayez, quien no dudó en señalar ante los militares que el ARC «7 de Agosto» es «una Embajada más importante» que las que se encuentran en tierra firme.
«Para todos los colombianos que viven en Emiratos Árabes recibir a este buque de nuestra Armada es un gran acontecimiento y prueba de ello es el enorme interés que han mostrado por visitarlo», concretó el diplomático.
Durante su estancia en EAU, los militares no solo han recibido en su buque a curiosos y a las autoridades locales, sino que han tenido la oportunidad de visitar Dubai.
Los marineros recorrieron los 120 kilómetros que unen la costa del golfo de Omán con la del golfo Pérsico y entraron en contacto con «una cultura tan interesante, tan importante y tan lejana», en palabras de Alonso Torres.
De esta forma pudieron conocer «una emblemática ciudad que ha despertado la atención a nivel mundial por su arquitectura, su construcción y su espectacular desarrollo», en referencia a Dubai.