Bogotá, 5 ago (EFE).- El procurador, Alejandro Ordóñez, pidió hoy al Gobierno que no actúe «con premura» en lo referido a la investigación del accidente de helicóptero en el que murieron ayer 16 policías al caer la aeronave en una zona boscosa de Antioquia tras, al parecer, chocar contra una ladera.
«En esto el Gobierno no debe actuar con premura, debe eso sí hacer las investigaciones prontas y rápidas para esclarecer cuáles fueron las causas», declaró Ordóñez a periodistas.
Según las primeras informaciones del Ministerio de Defensa, el helicóptero Black Hawk, viajaba entre las poblaciones de Carepa y Chigorodó, y se precipitó a tierra en esa zona de la región del Urabá tras chocar contra una ladera «posiblemente» por las condiciones meteorológicas adversas.
Posteriormente, el presidente, Juan Manuel Santos, negó que se tratara de un atentado.
En la aeronave viajaban 18 policías, de los cuales al menos 16 murieron y dos resultaron heridos de gravedad, según últimos datos actualizados.
Todos ellos formaban parte de los comandos jungla de la Policía, un equipo de elite especializado en operativos en zonas selváticas que en ese momento realizaba una misión contra el Clan Úsuga, la mayor banda criminal del país, nacida tras la desmovilización de las paramilitares Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
Ordóñez, que transmitió su solidaridad a la Policía, subrayó que se deben esperar «las conclusiones de la investigación para saber las causas del episodio».
En este sentido, dijo que «en el caso de que se trate de eventos criminales» el Gobierno debe «esclarecer cuáles son los responsables», y que en ello la Procuraduría, estará «muy vigilante haciendo los acompañamientos para lograr conocer rápidamente cuales fueron las causas de este episodio».