Bogotá, 19 nov (EFE).- El exlíder de la guerrilla colombiana del Ejército Popular de Liberación (EPL), Óscar William Calvo, de cuyo asesinato se cumplen mañana 30 años, será recordado con un homenaje en el que se evocará su liderazgo en los procesos de paz de la década del 80, explicaron hoy a Efe los organizadores.
Con el tributo, esperan retomar la voz de Calvo y su «propuesta de realizar una apertura democrática y una Asamblea Nacional Constituyente» que influyó en la creación de la Carta Magna colombiana de 1991, según relató a Efe su hermana Fabiola Calvo.
Óscar William Calvo fue asesinado a los 32 años, el 20 de noviembre de 1985 en una calle de Bogotá, un año después de firmar un acuerdo de cese el fuego y diálogo nacional con el Gobierno del entonces presidente Belisario Betancur (1982-1986).
Además, el objetivo en el 30 aniversario de su asesinato es retomar la figura de un hombre que murió «en pleno proceso de paz, siendo miembro» de la comisión negociadora del EPL y su vocero, agregó.
«En ese marco (Calvo) es asesinado y lo que queremos es recobrar la memoria histórica y el legado y la propuesta que él hizo al país», subrayó.
Finalmente, aquel impulso de Calvo fructificó seis años después de su muerte en un acuerdo de paz que permitió la desmovilización de la mayoría de los integrantes del EPL, en 1991, si bien un pequeño reducto mantuvo las armas hasta hoy en una zona fronteriza con Venezuela.
Entre las reivindicaciones políticas que hizo el vocero del EPL fue reclamar «la soberanía popular que no la tenía el pueblo sino el Senado», una reivindicación que «fue inusitada en ese contexto», recordó su hermana Fabiola Calvo.
Para él, era fundamental hacer un referéndum que condujese a esa Asamblea Constituyente, una idea innovadora que constituye «su legado fundamental», según destacó.
El acto, también servirá para reclamar que termine la impunidad que ronda el asesinato de Calvo, ya que en opinión de su hermana «es absolutamente necesario», que se sepa la verdad sobre lo que sucedió, si bien subrayó que no le «interesan castigos».
«No creo que las cárceles (en Colombia) sirvan para que se asuman posturas distintas a las que se han tenido en la vida, al contrario son una escuela», destacó Fabiola Calvo.
En su opinión, hubo «implicaciones de la Fuerza Pública» en el asesinato de su hermano, tal y como demostró su abogado Eduardo Umaña, que también fue víctima de homicidio.
Fabiola Calvo también reivindicó el rol de su fallecido hermano en la actual coyuntura colombiana en la que el Gobierno trata de llegar a un acuerdo de paz con las guerrillas que todavía operan en el país.
En este sentido, recordó una de sus frases que considera más representativas: «Estamos por la paz, deseamos la paz pero hay que luchar por los cambios que permitan la paz».