martes, 8 de diciembre de 2015
Flavia Pennetta: «Con 33 años, me siento vieja para el tenis»

Barcelona, 9 nov (EFE).- La tenista italiana Flavia Pennetta, que acaba de ser escogida como Mejor Tenista del 2015 por la Asociación de Periodistas de Tenis (APT), ha decidido retirarse, porque ya no siente la misma ilusión que las jóvenes raquetas del circuito.
«Decidí retirarme, porque en muchos momentos, ya no tenía motivación ni ambición. Con 33 años, me siento vieja para el tenis, pero no para vivir la vida», asegura.
Nacida en Brindisi (Italia) el 25 de febrero de 1982, pero residente en Barcelona desde hace muchos años, Flavia Penneta cuelga la raqueta tras ganar 11 títulos individuales y 17 de dobles junto a la argentina Gisela Dulko, con la que llegó a ser la pareja número uno del mundo.
Paradójicamente, su carrera profesional llegó a su punto álgido el pasado 12 de septiembre, cuando se proclamó campeona del Abierto de Estados Unidos ganando a su compatriota Roberta Vinci, en la que fue la primera final de la historia de un Grand Slam jugada por dos tenistas italianas.
Esa triunfo la convertía en la sexta jugadora mundial, su mejor ránking, pero allí mismo, en la pistas central de Flushing Meadows, Pennetta anunció que dejaba el tenis.
Mientras encauza su nueva vida, seguirá viviendo en la capital catalana, junto a su novio, el también tenista del RCT Barcelona-1899 Fabio Fognini.
«Barcelona es mi casa o una parte de mi casa, donde me he sentido muy bien. He estado siempre muy tranquila aquí. Es como mi paraíso, porque Barcelona te lo ofrece todo. La calidad de vida es muy alta, la gente muy discreta y cuando vengo aquí paso desapercibida, a diferencia de Italia», revela.
Su decisión de dejar el tenis profesional estaba ya meditada, aunque reconoce que nunca pudo imaginar que fuera así: «Fue una despedida perfecta. La había soñado pero nunca pensé que podría hacerse realidad. Fue espectacular. Ha pasado un tiempo y aun no me lo creo, pero estoy muy contenta de como acabó todo».
«Fue algo que yo ya había pensado hacer. No fue una cosa que decidí ese día, en absoluto. Mi plan era terminar el US Open, nunca pensando en llegar a la final, y no decir nada. Hubiese jugado los torneos de Asia y a fin de año lo hubiese anunciado en una rueda de prensa», añade.
Pero cambió de opinión al llegar a la última ronda: «Cuando llegué al día de la final, lo pensé un poquito, lo hablé con mi entrenador, Salva Navarro, y mi preparador físico, y les dije que, pasara lo que pasara en la final, anunciaría que ya no iba a jugar más. Ellos lo aceptaron y yo pensé que decirlo en un estadio como el Arthur Ashe de Nueva York era perfecto».
Ante Vinci, jugó sin pensar en que era su último partido. «Estaba tan acojonada que solo me pasaba por la cabeza que era una oportunidad muy grande para mí; era mi gran oportunidad y no quería que se escapara», desvela.
Aun no ha encaminado su futuro, pero no le importaría ser capitana del equipo de Italia en la Copa Federación. «Se puede hablar. De todo se puede hablar, porque yo me veo en el tenis, no sé en que función, pero sería una lastima si todo lo que he hecho se quedará para mi misma, me gustaría compartirlo», comenta al respecto.
Sobre los mejores momentos destaca, más allá de llegar al ‘top-ten’ y ganar el Abierto de Estados Unidos, sus cuatro títulos de Copa Federación, «porque creamos un grupo de amigas (Roberta Vinci, Sara Errani, Francesa Schiavonne y ella) fuera del tenis, e incluso tenemos un chat de las cuatro que es una risa y gracias a dios que nadie puede ver lo que decimos, porque podrían salir muchas cosas a la luz», responde entre risas.
Sobre la tenista catalana Clara Badosa, elegida a sus 18 años Tenis Revelación del año, comenta que «juega muy bien, golpea la pelota muy limpiamente y físicamente está haciendo un buen trabajo».
«Ella es grandota, ahora todas los son y eso le ayudará mucho. Yo, por ejemplo. era de las más pequeñas. El tenis ya no es sólo técnica y el físico es muy importante. Además, tiene un equipo técnico detrás que lo está haciendo muy bien, pero Clara es joven y se lo tiene que tomar con mucha calma, porque la carrera es muy larga y debe llegar en el momento perfecto», añade.
Sobre otra española, la número 3 de la WTA Garbiñe Muguruza, Pennetta dice estar convencida que «puede llegar al número uno», porque «tiene un potencial increíble, juega muy bien y tiene algo que es importantísimo en una tenista: un carácter ganador y es muy dura en la pista».