lunes, 28 de septiembre de 2015
Activistas piden despenalizar aborto y fin de embarazos forzados en Paraguay

Asunción, 28 sep (EFE).- Un total de 32 organizaciones defensoras de los Derechos Humanos pidieron hoy la despenalización del aborto y el fin de los embarazos forzosos en Paraguay, en el Día de la Despenalización del Aborto en América Latina y el Caribe, que se celebra cada 28 de septiembre.
A través de un comunicado conjunto, las organizaciones solicitaron a la comisión que estudia la reforma del sistema penal en el Congreso paraguayo que «contemple y apruebe la despenalización del aborto», especialmente en los casos de «violación, incesto, malformaciones que derivan en inviabilidad fetal, peligro de la salud física y mental o de la vida de la mujer y por el derecho de las mujeres a decidir sobre sus cuerpos».
En Paraguay, el aborto y su tentativa se encuentran penalizados, con una pena de hasta cinco años, y sólo está autorizado interrumpir un embarazo cuando hay un riesgo de vida para la madre, por lo que las organizaciones pidieron el «cese de la criminalización de niñas y mujeres».
Reclamaron también que el Estado paraguayo garantice la atención integral para aquellas niñas y mujeres víctimas de abusos sexuales y embarazos por violación, y reclamaron políticas de educación sexual y de información y orientación a niños, niñas y adolescentes para protegerse frente a estos abusos.
También exigieron el cese del internamiento innecesario de niñas embarazadas en instituciones, y pidieron que se respete su derecho a vivir con sus familias y no se las despoje de sus hogares.
Demandaron además que el Estado ofrezca a las niñas con embarazos forzados la posibilidad de interrumpir su gestación debido al riesgo de vida que implica para ellas, e instaron a los servicios de salud públicos a que proporcionen apoyo y atención a las mujeres y adolescentes que de manera autónoma decidan continuar con sus embarazos.
Insistieron además en que se establezcan «medidas para prevenir, proteger, castigar, reparar y erradicar» toda forma de violencia contra niñas y mujeres, y especialmente las que atentan contra su autonomía sexual.
El debate sobre el aborto se reabrió en Paraguay a raíz del caso de la niña conocida con el nombre ficticio de Mainumby, que quedó embarazada a los diez años como consecuencia de una violación presuntamente perpetrada por su padrastro.
La menor, que dio a luz el pasado 13 de agosto, fue «obligada a llevar a término su embarazo», pese al riesgo que implicaba para su salud y su vida, dado que la posibilidad de sufrir complicaciones y muerte es cuatro veces mayor en embarazos a esa edad, subrayaron las organizaciones.
Además, según denunció recientemente a Efe Elizabeth Torales, la abogada de la madre de la niña Mainumby, el Estado paraguayo «no ha cumplido con sus obligaciones» para garantizar el derecho de la menor y de la recién nacida a la salud, la vivienda o la educación.
Según las cifras de 2014, un total de 684 niñas entre 10 y 14 años dieron a luz en Paraguay, embarazos que a esa edad son considerados como fruto de violaciones, mientras que unos 20.000 de los alumbramientos fueron de adolescentes de 15 a 19 años.
Además, según los últimos datos disponibles en el Ministerio de Salud Pública, en 2009 un total de 8.660 mujeres estuvieron hospitalizadas por un aborto.
Por otra parte, más de 400 niños y adolescentes fueron víctimas de abusos sexuales en el primer semestre de 2015, según cifras oficiales.