Asunción, 16 nov (EFE).- El fiscal general del Estado de Paraguay, Javier Díaz Verón, viajará mañana a Brasil para ultimar el proceso de extradición de Vilmar Acosta, un exalcalde acusado de ser el autor intelectual del asesinato periodista Pablo Medina en 2014.
Díaz Verón señaló que su viaje tiene como objetivo poner a Acosta «a disposición de la justicia y que empiece el proceso de investigación y establecer la responsabilidad de las personas que tuvieron participación en el homicidio del periodista Pablo Medina», afirmó a través de un comunicado del Ministerio Público.
El fiscal general aseguró además que para el Ministerio Público paraguayo es una «prioridad» y una «necesidad» que Acosta se someta a la Justicia paraguaya.
«Una vez que esté (Vilmar Acosta) en Paraguay se someterá a la Fiscalía a los efectos de determinar alguna declaración indagatoria, tendrá derecho a abstenerse o no, y a partir de ahí se informará al juez y se determinará su lugar de reclusión», dijo el fiscal.
Especificó además que a la llegada de Acosta a Paraguay estarán presentes agentes de la Policía Nacional y del Ministerio Público, así como médicos forenses y enfermeros.
El Gobierno de Brasil comunicó oficialmente al de Paraguay el pasado miércoles que procedería a extraditar en un plazo de 30 días a Acosta.
Acosta fue detenido en Brasil tras el crimen que acabó con la vida de Pablo Medina, corresponsal del diario ABC Color, y de su acompañante, Antonia Almada, ocurrido en octubre del pasado año en el departamento de Canindeyú, norte de Paraguay.
Ambos fueron acribillados por disparos atribuidos a dos sicarios, identificados como parientes de Acosta, entonces intendente de la localidad de Ypejhú por el Partido Colorado y quien está también imputado por producción y acopio de marihuana.
Medina era conocido por sus trabajos periodísticos en los que relacionaba a políticos de Canindeyú con las redes de tráfico de marihuana que operan en ese departamento, fronterizo con Brasil.
Las fuerzas policiales paraguayas no han dado todavía con el paradero de Wilson y Flavio Acosta, hermano y sobrino, respectivamente, del exintendente, quienes son buscados como autores materiales del asesinato.
Desde 1991 han sido asesinados en Paraguay 17 periodistas, 7 de ellos en los últimos 2 años y medio, según un informe del Sindicato de Periodistas de Paraguay (SPP).