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Discurso de Gabriel Boric
Asunción, 28 jul (EFE).- El Gobierno paraguayo se comprometió hoy a establecer una agenda de trabajo conjunto con la asociación Panambi, que representa a personas travestis, transexuales y transgénero, para prevenir la violencia hacía la población trans del país suramericano, informó esa agrupación en un comunicado.
El compromiso se alcanzó tras una reunión entre el ministro del Interior, Francisco De Vargas, y representantes de Panambi, quienes le entregaron una investigación que documenta al menos 54 casos de muerte e impunidad contra personas trans entre 1989, año de la caída de la dictadura, y 2013.
Bajo el título «Olvidadas hasta en la muerte – Asesinatos a personas trans durante el periodo democrático en Paraguay», la investigación plantea además recomendaciones que fueron presentadas a De Vargas por Iren Rotela, presidenta de la Asociación Panambi, y Marcela Valdez, de la directiva de la organización,
El informe también demanda acciones concretas a los poderes del Estado para la plena garantía de los derechos de las personas trans.
Según Rotela, el ministro se comprometió a establecer los canales de contactos con las instancias de derechos humanos de su departamento, así como de la Policía Nacional, para la definición de una agenda de trabajo futuro que permita responder a esa demanda de Panambi.
El desarrollo de esta agenda prevé reuniones similares en instancias del poder Legislativo y Ejecutivo, así como la realización de una audiencia pública en agosto.
Rotela también expuso las situaciones a las que se exponen las personas trans que ejercen trabajo sexual en la calle, y añadió que es también la misma Policía la que «nos vulnera y violenta».
Paraguay es el único país de la región que no posee una legislación contra la discriminación, según denuncian organizaciones de defensa de lesbianas, gais, transexuales y bisexuales (LGTB) y de protección de los derechos humanos.
Panambi trabaja para presentar en 2016 un anteproyecto de ley que facilite el cambio de nombre y género en los registros públicos en Paraguay, y elimine así las trabas administrativas que enfrentan las personas trans.