sábado, 12 de septiembre de 2015
El argentino Parternosto expone sus obras que buscan el silencio en Sao Paulo

Daniel Muñoz
Sao Paulo, 12 de septiembre (EFE).- En busca de un instante de silencio en medio del «ruido visual» de la contemporaneidad, el artista argentino César Paternosto, líder de la abstracción geométrica, inauguró hoy en Brasil su más reciente exposición, en la que busca ofrecer al público un momento de «meditación.»
Ubicada en la Dan Galería, en el corazón del barrio de Jardins, en Sao Paulo, la exposición del artista octogenario reúne obras con su manera singular de pintar vacíos blancos con «apenas una nota de color», como describió su estilo Paternosto a Efe.
Su objetivo es hacer que el público circule por el ambiente de la exposición para así tener diferentes perspectivas.
Bautizado por el artista como «El Sonido del Silencio», la exposición recibió ese nombre por el gusto de Paternosto de pintar mientras escucha música, especialmente contemporánea, lo que siempre ha sido una de sus pasiones, confesó.
«Lo que quiero evocar principalmente son esas notas sueltas de la música moderna que van creando silencios», explicó Paternosto, quien añadió que también escucha «mucho jazz» durante su proceso de trabajo e, incluso, «a veces» algunos tangos de su «juventud», bromeó.
Paternosto señaló que sus obras no han de ser consideradas simples lienzos para ser contemplados, sino objetos que forman parte de la arquitectura que las rodea, por lo que no deben ser encaradas sólo frontalmente.
El artista explicó que su visión del arte geométrico parte de la búsqueda del valor más ancestral del dibujo: la línea, que ya se manifestaba como expresión artística en las sociedades más antiguas de la civilización.
El pintor argentino confesó que tuvo esa revelación durante una visita que hizo en los años setenta a Perú, donde quedó fascinado por el minimalismo artístico que se podía ver en el trabajo realizado por los incas ya en el siglo XV.
De esta manera, el artista busca que las personas puedan llegar a tener un «momento de paz y de silencio».
Paternosto admitió que la suya es una apuesta arriesgada ya que «por lo general» en exposiciones colectivas «la gente pasa de largo» frente a sus obras; pero señaló que «de vez en cuando aparece alguien que se detiene frente a las obras y busca esta especie de silencio».
A pesar de haber vivido en Estados Unidos y de residir actualmente en la localidad española de Segovia, el artista no ocultó su lado argentino y reveló que, en muchas de sus obras, se encontró a sí mismo «recuperando algunos títulos de los cuentos de Borges».
En sus obras expuestas en Sao Paulo, Paternosto utilizó sólo tinturas blancas, negras, rojas y amarillas, pues «buscaba los primeros pigmentos a los que la humanidad tuvo acceso», tratando de encontrar ese «rojo ancestral».
«Mi arte tiene mucha conexión con la arquitectura», apuntó antes de añadir que «las obras geométricas se adaptan mejor a los lugares públicos que las estatuas ecuestres con espadas, que eran parte de nuestro pasado».
La exposición permanecerá abierta al público durante exactamente un mes, hasta el 12 de octubre.