lunes, 12 de octubre de 2015
Estado mexicano de Colima pide ayuda para no convertirse en foco de violencia

México, 12 oct (EFE).- El Gobierno de Colima pidió hoy ayuda a las autoridades federales para capturar a los responsables del ataque al exgobernador Fernando Moreno Peña y evitar que ese estado del occidente de México, ubicado entre los conflictivos Jalisco y Michoacán, se convierta en un nuevo foco de violencia en el país.
«Hemos pedido el apoyo y la coordinación con el Gobierno federal y las diferentes corporaciones de seguridad para esclarecer estos hechos», dijo el actual gobernador del estado, Mario Anguiano Moreno, en una conferencia de prensa.
Anguiano, del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI), dijo haber hablado personalmente con el secretario de Gobernación (Interior), Miguel Ángel Osorio, y con el de Marina, Vidal Francisco Soberón, «quienes de inmediato mostraron su total disposición para buscar a el o los responsables de estos actos».
«No escatimaremos esfuerzos ni recurso alguno para capturar a los responsables. No habrá impunidad en estos hechos tan lamentables», añadió.
El exgobernador Moreno Peña (1997-2003), también del PRI, fue atacado este lunes a tiros por dos personas en un restaurante y se encuentra «delicado, pero estable», indicó en la conferencia de prensa el secretario estatal de Salud, Agustín Lara Esqueda.
Lara dijo que el político recibió seis impactos de bala, uno en cada brazo, tres en el tórax y uno en el cuello que dejó «una lesión en la yugular derecha» que fue atendida en el lugar del ataque.
Detalló que el exgobernador llegó «consciente» y «alerta» al Hospital Regional Universitario, donde se le practicaron diversos estudios antes de ingresar a quirófano para «reparar las fracturas» y cerrar la yugular.
Más tarde, el gobernador Anguiano informó a través de la red social Twitter que, «por fortuna, el Licenciado Fernando Moreno ha salido con bien de intervención quirúrgica» y que el secretario estatal de Salud y el equipo médico que lo atiende informarán en adelante de su salud general.
Por su parte, el secretario estatal de Seguridad Pública, Félix Humberto Vuelvas, indicó en la rueda de prensa que, según los primeros testimonios, dos sujetos entraron al restaurante y «uno de ellos se fue de manera directa hacia la mesa donde se encontraba Moreno y le disparó en varias ocasiones».
Después del ataque, ambos agresores salieron corriendo hacia el norte de Colima, capital del estado homónimo, indicó Vuelvas.
De inmediato se puso en marcha un operativo de seguridad en el que participa la Policía Federal, que incluye revisiones en avenidas principales y centrales de autobuses, con el fin de dar con los responsables.
También se activó un protocolo de seguridad en el hospital donde el exgobernador está internado.
La responsable de Comunicación del PRI en Colima, Glenda Baltazar González, dijo a Efe que el exrector de la Universidad de Colima Carlos Salazar Silva, quien se encontraba con Moreno en el momento del atentado, resultó ileso.
Moreno Peña se desempeñó en las elecciones del 7 de junio pasado como delegado especial del PRI en el suroccidental estado de Michoacán.
Manlio Fabio Beltrones, líder nacional del PRI, colectivo al que también pertenece el presidente Enrique Peña Nieto, lamentó a través de Twitter «el atentado contra nuestro delegado Fernando Moreno Peña» y dijo esperar «el pronto esclarecimiento de estos hechos».
Apenas el sábado pasado otro político del PRI, el regidor de Acapulco (estado sureño de Guerrero), Jesús de la O Gallardo, fue asesinado a tiros en el poblado de Tres Palos.
Colima, en el litoral del Pacífico mexicano y donde se encuentra el puerto de Manzanillo (uno de los más importantes del país), limita al norte con Jalisco y al sur con Michoacán, estados que han sido centros de operación de cárteles del narcotráfico y focos de violencia en los últimos años.
Si bien ha sido centro de producción y exportación ilegal de drogas sintéticas y precursores, Colima ha estado en gran medida libre de la violencia asociada con el crimen organizado que ha caracterizado a Jalisco, Michoacán y otras entidades que han sido intervenidas en años recientes por el Gobierno federal, como Tamaulipas y el Estado de México.
Con todo, el exgobernador Jesús Silverio Cavazos Ceballos (2005-2009), también del PRI, fue asesinado el 21 de noviembre de 2010.