lunes, 12 de octubre de 2015
Las guerras se mantienen como la principal causa del hambre, según informe

Berlín, 12 oct (EFE).- Unos 795 millones de personas pasan hambre en el mundo y los conflictos armados tienen una relación directa con esta situación, revela el Índice Global del Hambre (GHI) de 2015, según el cual alrededor de 172 millones de personas sufren actualmente las consecuencias de una guerra.
«Conflictos como el de Siria, Irak o Sudán del Sur son los principales causantes del hambre», señaló hoy en Berlín Bärbel Dieckmann, presidenta de la ONG alemana Welthungerhilfe (Ayuda Mundial contra el Hambre).
Esta ONG, que elabora anualmente el índice junto a la irlandesa Concern Worldwide y el Instituto Internacional de Investigación sobre Políticas Alimentarias (IFPRI), recordó que «más del 80 % de los refugiados en todo el mundo se queda en su tierra o en los países vecinos».
Estas personas «son las que más sufren con la violencia y la situación sin perspectivas» e, «inadvertidas por la comunidad internacional, tienen que luchar cada día para conseguir comida, agua y atención médica», subrayó Dieckman.
Según el informe, una media de 42.500 personas huyeron el año pasado a diario de sus hogares y aproximadamente 59,5 millones en todo el mundo viven desplazadas a causa de los conflictos armados, más que nunca antes.
«Sólo si se consigue eliminar las causas de los conflictos armados, en Siria, por ejemplo, podemos acabar con el hambre a largo plazo», advirtió Dieckmann.
Los dos países con el mayor índice de hambre -República Centroafricana y Chad, seguidos de Zambia,- han vivido un conflicto armado o han estado sumidos en la inestabilidad política en los últimos años, recoge el informe.
Mientras, Angola, Etiopía y Ruanda, países que hace 20 años todavía estaban sumidos en una guerra civil, han mejorado sustancialmente su situación desde el fin de sus respectivas contiendas.
El índice muestra una evolución positiva también en los países en desarrollo, que desde el año 2000 han progresado notablemente en combatir el hambre, y cuyo índice a nivel global descendió un 27 %.
Entre los diez países que lograron desde 2000 la mayor reducción de su índice de hambre (entre un 53 % y un 71 %) figuran tres sudamericanos -Brasil, Perú y Venezuela- , un asiático (Mongolia), cuatro ex repúblicas soviéticas (Azerbaiyán, Kirguizistán, Letonia y Ucrania) y dos ex repúblicas yugoslavas (Bosnia y Croacia).
«Estamos más confiados que nunca en que podremos vencer el hambre siempre y cuando no nos conformemos con lo logrado hasta ahora», declaró Klaus von Grebmer, experto del IFPRI.
A pesar de los avances registrados en combatir la hambruna en el mundo, el hambre en 44 de los 117 países comprendidos en el índice continúan presentando niveles «muy graves», y en otros 8, «alarmantes».
El hambre en el mundo sigue siendo un desafío, con una de cada nueve personas con malnutrición crónica y más del 15 % de los niños con retrasos en el crecimiento como consecuencia de deficiencias nutricionales.
El Índice Global del Hambre, que se actualiza cada año y se presentó hoy en su décima edición, no incluye a algunos de los países más pobres del mundo por falta de datos, lo que hace pensar que la situación de hambruna global podría ser incluso peor de la reflejada en este documento, advierten sus autores.